Los parlamentarios valencianos cobrarán con efecto retroactivo un 0,25% más al sumarse a un decreto del Gobierno de España. La subida se suma a la del 2,5% de enero y se acumula, en menos de tres años, un aumento del 4,25%.
La medida se basa en una resolución de la Mesa de las Cortes de principios de año que ya aprobó incrementar en un 2,5% las cuantías retributivas del personal al servicio del Parlamento y a sus señorías. El citado acuerdo incluía (amén de la subida del 2,5% de la que ya disfrutan los parlamentarios) un segundo incremento de los salarios -más modesto- ligado a la evolución del PIB que ha pasado desapercibido.
Comparando las tablas retributivas de 2017 y 2019, los diputados han experimentado un aumento del 4%, al que ahora hay que sumar otro 0,25%. Un 4,25% en poco más de dos años que ha hecho que un diputado raso pase de percibir, en 2017, 3.604,85 euros -contando la dedicación exclusiva y asumiendo que vive a menos de 10 kilómetros del Palau dels Borja- a percibir, en la próxima nómina 3.759 euros, 155 euros más.
A todo ello, los diputados que se desplazan desde fuera de Valencia reciben una indemnización por kilometraje a razón de 0,32 euros el kilómetro cada vez que fichan en una comisión o pleno. Así, según los datos de indemnizaciones por asistencia del pasado mes de noviembre publicados en la web del Parlamento valenciano, hubo diputados que percibieron hasta 927 euros por asistir siete veces a las sesiones de la Cámara autonómica.
Aunque este último incremento del 0,25% puede ser muy bajo y no llegar a los 10 euros mensuales en el caso de los diputados que menos cobren, la subida se suma al incremento paulatino de los sueldos que sus señorías han percibido desde hace dos años. Unos incrementos que no siempre se han comunicado con luces y taquígrafos a los medios de comunicación.
Todo esto es muy bello e instructivo, teniendo en cuenta que hablamos del parlamento valenciano presidido por el especialmente progre Ximo Puig y con la vicepresidenta, portavoz y consejera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra.