Que los padres lleguen con el tiempo más que ajustado a llevar a sus hijos al colegio no es nada nuevo. Pero, que los lancen por encima de la verja para asegurarse de que pueden entrar después de que suene la campana, es, cuando menos, curioso a la par que una práctica de alto riesgo.
Desde mediados de septiembre dos carteles pegados a los lados de la puerta del colegio "Trillade" en Avignon (Francia) advierten a los padres para que no cometan la imprudencia de "lanzar a sus hijos a través de la verja".
?? FLASH - Le lancer d'#élèves est désormais interdit à l'école primaire de La Trillade, à #Avignon. Des parents d'#enfants en retard les avaient jetés par dessus le portail. (La Provence) #ecoles pic.twitter.com/opulBppDXI
— Mediavenir (@Mediavenir) November 9, 2020
"¡No voy a tirar a mis hijos por el portón!" y "Cuando llegue tarde, volveré a las 10:00 o a las 3:00"
Según la directora del centro, no ha sucedido muchas veces, pero sí han visto cómo los padres que llegaban después de que sonara la campana del inicio de clase, "echaban a sus hijos, literalmente, dentro". Con riesgo y todo, por el momento, no ha habido que lamentar lesiones. Otra cosa es que el lanzamiento les deje a los niños secuelas y que, por ejemplo, terminen votando a Macron cuando crezcan.
Al no ser una práctica puntual, en el colegio se han visto obligados a colgar carteles advirtiendo que dejaran de hacer algo tan peligroso y recordando que los niños son seres humanos: "¡No voy a tirar a mis hijos por el portón!" y "Cuando llegue tarde, volveré a las 10:00 o a las 3:00". Es que cuando uno va con prisa, ya ni piensa y los colegios son verdaderas junglas donde se aplica la ley del más fuerte.
Quizá lo próximo en este centro será competir por ver qué padre lanza a su hijo más cerca de la puerta de entrada.