Según publica ABC, La localidad de Alboraya ha identificado a un can de Xàtiva con una muestra tomada cuando la ciudad estaba cerrada perimetralmente y multa a su propietario. Al más puro estilo de la serie CSI, a través del análisis de una muestra de heces que se recogió en la playa cuando la ciudad setabense estaba confinada por la alta incidencia del coronavirus en ese municipio, los datos cruzados del ADN canino de los que disponen las dos poblaciones valencianas ha permitido determinar que la sanción impuesta al dueño del animal se deberá gravar al vecino de Xàtiva.
Según ha informado el Ayuntamiento de Alboraya en un comunicado, la Policía Local recogió una muestra de heces en la playa el pasado mes de enero, cuyo análisis ha arrojado unos «resultados inesperados» ya que el perro identificado pertenecía a un vecino de Xàtiva, coincidiendo con los días en que la capital de La Costera estuvo confinada por la alta incidencia del coronavirus entre sus vecinos.
Corre un insistente rumor de que la ministra de Sanidad, Carolina Darias, ha pedido el fusilamiento -en la misma playa- del dueño del can por imprudencia temeraria... Que no, Maldita, que no, que esto último no es cierto. Por si acaso...