Es una grosería, ciertamente, tirarle un cuesco a tu señora… o a cualquier otro… u otra. Pero la estupidez de la ley contra la violencia de género tiene estas cosas. Que un hombre sea condenado por violencia contra su esposa a la que en un momento de discusión marital echó un flato por la zona inferior. Y eso está muy mal pero no existen dudas razonables sobre si debe ser incluido en el Código Penal. Es igual, nuestros políticos seguirán con la espantosa estafa de la lucha contra esta lacra y el terrorismo machista. Vende mucho. Es un tópico social. Hispanidad redaccion@hispanidad.com