Decíamos ayer que el mundo actual se mueve entre el delito y el pecado, entre lo ilegal y lo inmoral, dos realidades que no tienen por qué coincidir. Pedro Almodóvar es el progre que se dedica a dar lecciones de moral y de legalidad. Pero mira por dónde, le han pillado con el carrito del helado. Y es que no hay que ver la paja en el ojo ajeno. En cualquier caso, está muy feo eso de amenazar a los periodistas que publiquen una información que, si bien ha sido obtenida vía pirata informático, no deja de ser cierta, es posible que mucho de lo descubierto perteneciera al pasado, pero ahí entra de lleno en la distinción aludida, entre lo legal y lo moral. En cuanto a Leo Messi... (en la imagen) mire usted, le han cogido a los dos lados del Atlántico y, al menos en uno de ellos, ha decidido usted, o su señor padre, pagar. En esas condiciones, ni Almodóvar ni Messi deberían amenazar a los medios informativos. Revela muy poca humildad. Matizar la información sí, es necesario, pero amenazar queda un poco feo. Hispanidad redaccion@hispanidad.com