El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha reconocido que la economía española no creció el 3,3 sino el 3,2%, durante el año 2015. Una décima, sí, pero revela que el crecimiento progresivo del PIB puede haber tocado fondo. Y eso no es una buena noticia. A lo mejor el efecto Rajoy ha aguantado hasta las elecciones, no mucho más. Hispanidad redaccion@hispanidad.com