Bueno, no son prejubilaciones pero sí bajas voluntarias bonificadas. Pero el efecto viene a ser el mismo, porque naturalmente, a los 53 años es difícil encontrar trabajo, salvo chapuzas de economía sumergida para enlazar con la jubilación. Comprendo que Telefónica de España es una empresa con mucho personal y encima muy resabiado. Sí, resabiado, porque aún se comportan, con todas las excepciones que se quiera, como funcionarios pendientes de trabajar lo menos posible y cobrar a fin de mes. Ahora bien, el buen gestor es precisamente ese: el que sabe motivar a un personal resabiado e involucrarle en el servicio que presta la empresa a la sociedad. Y si lo hace RENFE, pues lo mismo. Ahora bien, prejubilar es como cerrar bibliotecas. ¿Para qué aprovecha la experiencia de tantos años? Para nada. Y encima aumentamos las nóminas de las clases pasivas en una sociedad que sólo tiene un problema económico: su envejecimiento. Hispanidad redaccion@hispanidad.com