Sr. Director:
La paradoja es que la mayor amenaza contra el acuerdo procede de la hostilidad del resto del nacionalismo catalán. Los celos de Quim Torra y de JpC son el mayor obstáculo para que ERC se arrogue el derecho a hablar con Pedro Sánchez en nombre no ya del gobierno, sino del pueblo de Cataluña, en la más pura tradición de la extinta CiU. Se avecinan elecciones anticipadas en Cataluña, aún no convocadas pero si anunciadas, y los exconvergentes se revuelven contra el papel secundario que les auguran las encuestas. Más tras la decisión de la Junta Electoral y del Parlament, que han decidido la inhabilitación de Torra. Pero al margen de esta variable, la guerra civil en el independentismo es tristemente la mayor baza del constitucionalismo frente a un Pedro Sánchez dispuesto a todo para mantenerse en la Moncloa.
Valentín Abelenda