Sr. Director:
“Estas cosas no se pueden pedir ni se deben rechazar”
Bolaños dixit. Cuando sin ser interpelado al respecto soltó el discursillo de su día de gloria, después de haber urdido en contra de quien confió en él para tenerlo como ayudante. El sargento contra el teniente. Eso en el ámbito militar tiene un nombre y el acto se paga con el desprecio de los jefes y la tropa, aunque fuera el mismo Napoleón quien decidiera el ascenso del subalterno y la defenestración del mando
Bolaños nacido en el año de la muerte de Franco ,1975, cuenta en la actualidad mas de 45 años, de los cuales su vida profesional, fuera de cargos orgánicos en el PSOE, desde 2014, ha estado vinculada al Banco de España, profesor en el Instituto de Empresa y abogado de laboral en el despacho de Uría y Menéndez. Su experiencia académica versa sobre Derecho Laboral y en los dos cursos que realiza como licenciado en Derecho obtiene el número uno de su promoción. Resulta extraño que un abogado con sus características no haya progresado en el mundo privado de la abogacía y se haya refugiado en lo político con sólo 39 años, habiendo dejado lo público, después de su acceso al Banco de España, por lo privado en su llegada a U&M y de ahí al mundo político con el PSOE.
Es decir su ambición es sólo política. No fue lo Laboral, donde debería ser un experto, ni tampoco la Enseñanza en el IE y mucho menos lo es el mundo de la abogacía privada donde hay que “currárselo” para pasar de abogado a socio en cualquier bufete. Y menos puede decirse que sea un hombre a lo Amancio, de iniciativas personales, asumiendo riesgos en busca de éxito montando su propio despacho, lo que con su CV, su paso por el BdE y por U&M sería lo mas lógico, si las ambiciones fueran profesionales y no políticas.
¿A qué se debe el cambio, si es que existió, o simplemente la decisión? Muy sencillo: progresar trabajando es mucho mas difícil que progresar medrando. ¿Y donde se medra?: en el mundo profesional de la empresa privada es casi imposible porque dependes de lo obtenido con tu trabajo, basado en objetivos claros y concretos, que luego se reflejan sin paliativos en una cuenta de resultados. Por tanto abandonada la suerte de trabajar con riesgo, bien económico como emprendedor o echando tiempo con 14h diarias como hacen los ejecutivos de las empresas privadas de este país para prosperar, queda lo fácil : la política.
Ese banderín de enganche lo toma en 2014. ¿Por qué?¿Quien lo ficha? En 2017 es elegido Sánchez como secretario general del PSOE en aquella votación tumultuosa y extraña con cortina-urna incluida teniendo contratado de asesor áulico a Iván Redondo, como mago de ganar elecciones con aspirantes del Partido Popular. Ya estaba allí Bolaños y se coloca, o lo coloca, Sánchez a las órdenes de Redondo, para años mas tarde en una jugada palaciega defenestrarle. ¿Es esto medrar? Escuchemos a Don Pedro (el que tiene ganado su Don, no el fantoche plagiador o negrero de la ex UPyD-Cs Lozano) cuando Segismundo en su monólogo dice: “sueña el que a medrar empieza, sueña el que afana y pretende, sueña el que agravia y ofende….. … y el mayor bien es pequeño, que toda la vida es sueño…..”. La conclusión es muy triste para el medrador sobre todo cuando confía para su ascenso, decapitando a su antecesor, en quien no tiene escrúpulos para nada ni nadie que no sea él mismo porque al final ….“ y los sueños, sueños son”. Trabajar no es medrar, ni soñar, es cumplir con lo que sabes hacer y en función de tus horas de trabajo y resultados tangibles ser recompensado con lo que se llama salario, cuya etimología es destacable pues proviene de sal (¿la sal de la vida?) cuando este condimento era vital para el hombre.
Por eso dijo lo de “no puedes pedir ser…”. Porque no estaba en su mano la concesión y además quedaba marcado como prescindible, pero sí podía rechazar el ofrecimiento en caso de que sus condiciones laborales profesionales pudieran mejorar en otros ámbitos. Lo hacen muchos que en su vida profesional han gozado durante los 25 años últimos de la misma, de un sueldo de ministro o incluso mayor. Máxime cuando un ministro en manos de un autócrata tiene el mismo poder que el encargado de la limpieza o el ujier de turno. Y todavía peor en un gobierno de coalición donde el partido mayoritario está atado de pies y manos por el minoritario, que es quien de verdad soporta el poder del jefe de los ministros o primer ministro.
Así que no ha actuado como su homónimo Don Félix (coetáneo de Don Pedro) llamado el “Fénix de los Ingenios” sino como un pobre diablo al que otro Don de verdad, Don Francisco, le hubiera asaeteado astutamente con algún calambur parecido a la declaración que le hizo a su reina, Isabel de Borbón, “entre el clavel y la rosa Su Majestad escoja”. Aún cuando dicha reina poseía una belleza e inteligencia admitida por toda la corte de Felipe IV, cosa que no parece darse en su persona dentro de la nueva corte PSOE-podemita a la que ha querido pertenecer. De belleza es mejor no hablar en el tumulto al que pertenece pues nadie puede eclipsar “al guapo” y de inteligencia, tal y como van las cosas desde la llegada de esa turbamulta al Consejo de Ministros…… a las pruebas me remito.
Y de esas pruebas las mas lamentables, porque cuestan vidas, física y moralmente, están las decisiones sobre la pandemia de gripe-coronavírica. Se ufanan en decir que han salvado cientos de miles de vidas cuando aún no han querido contabilizar las muertes que se han producido, muchas de las cuales caen directamente sobre sus decisiones, que no conciencias, del 8 de marzo de 2020. Mas muertos que en la guerra civil del 36-39 de la que tanto gustan hablar cuando para toda la población española está tan en el olvido como Cabrera, Zumalacárregui o Esparteros.
Bolaños dijo lo de imposible rechazar porque se jugaba su medio de vida, pues está marcado y su retorno al riesgo del ámbito de lo privado le cae grande. En la política de nuevo cuño tiene su encaje para ser “un mandado” por 80.000€/año mas las prebendas inconfesables que saque.
Al resto de los españoles que mendigan un empleo y a los que rechazan los mismos por vivir mejor subsidiados ¡que les den¡. Total siempre pagarán aquellos que tengan una nómina superior a los 30.000€/año , es decir los ricos. Y tú Bolaños a chupar del bote desde tus 39 años en que llegaste al PSOE.