Sr. Director:

La existencia humana siempre dependiò de "naturaleza y cultura" y de esa forma la especie se perpetuò ya evolucionada desde hace mas de 50.000 años hasta nuestros contemporàneos. Se valiò para lograrlo de recursos y costumbres potenciados por descubrimientos e inventos que posibilitaron una vida mas fàcil y satisfactoria. Respecto a las drogas y las actuales consecuentes adicciones son culpables quienes consumen, producen y distribuyen, ademàs de la agregada responsabilidad que les cabe a polìticos, funcionarios, familias y educadores, por la liviandad con que suelen consolarse a partir de interpretar que hay "drogas blandas" y "drogas duras" (menos peligrosas y mas peligrosas, respectivamente) queriendo omitirse que toda droga conlleva en esencia "posible muerte". Es esa la causa por la que, de ser necesaria para curaciòn, requiere "receta y prescripciòn mèdica". ¡Solo los estùpidos no pueden entenderlo!

Desde antaño y con conocimientos en incesante expansiòn se emplearon substancias que, aunque gustosas y agradables, por su peligrosidad para la salud impulsaron a la ancestral cultura occidental a limitar y admitir solo unas pocas como vicios o "drogas sociales": entre ellas el alcohol y el tabaco alcanzaron para legar taras a sucesivas generaciones. La drogadicciòn, hasta nuestros dìas, es problema de difìcil soluciòn para quienes ignoran "la naturaleza" y se empeñan en despreciar "la cultura" como forma de vida eficiente en sociedad. Al respecto, tambièn las formas de vida que promueven o toleran "desvìos sexuales", el "exterminio de nonatos" y un exacerbado "erròneo ecologismo" son responsables de la perniciosa contracultura que aporta a desarticular las sociedades. Las sociedades, luego de dècadas de estimular con preferencia a "estùpidos" (faltos de entendimiento) soportando mafias, votando charlatanes inùtiles y contraculturales han invalidado su posible venturoso porvenir. ¡Y todo por "despreciar la cultura e ignorar la naturaleza"!