Sr. Director:
Una de las cuestiones clave entorno al aborto es el reconocimiento de la vida, que viene a ser la difusa línea que, para muchos, divide lo correcto de lo inmoral. La verdad es simple: la vida empieza en el momento de la concepción, pues es entonces cuando se genera un nuevo código genético, distinto al de los padres. No obstante, esta no viene a ser la respuesta que se quiere oír, ya que, simplemente, no conviene. Y es que, bajo esta verdad, el aborto no viene a ser más que un brutal eufemismo que trata que ocultar el significado real de lo que acontece: homicidio infantil.
Suceden así atrocidades como la que recoge Notivida (ver el documento adjunto): una controvertida cesárea practicada a una niña de 12 años, por supuesto, con movimientos feministas de por medio.
¿Desde cuándo un embarazo se interrumpe para continuarlo un tiempo después? Hablemos claro, la interrupción del embarazo no es una detención que se pueda reanudar, es la muerte de un bebé al que no se ha dejado vivir.