Sr. Director: 

Lean ese texto: “El clientelismo político es un intercambio extraoficial de favores, en el cual los titulares de cargos políticos regulan la concesión de prestaciones, a cambio de apoyo electoral”. Esa interacción interesada genera una red. Una red clientelar. Los partidos que se mantuvieron en el poder durante más años, tuvieron una red clientelar más sólida. El partido de Pujol, en Cataluña y el PSOE en Andalucia.

Derribar un edificio es más fácil que desmontar una red. Por eso, conviene limitar los mandatos. La democracia tiene aspectos criticables. El mencionado nos ha de interesar.

Después de decir esto, pensemos en las redes clientelares de una dictadura. Hay muchos motivos para no desear una dictadura. Éste no es un motivo menor. A través de WhatsApp se envían muchos videos ensalzando la dictadura. He de decir que me sorprende que haya tantos defensores de Franco.

El filósofo Luís Roca dice que una de las cuestiones que nos hemos de plantear es ésta: “Qué queremos, un Estado que sea una red clientelar de privilegios para los gobernantes o, una institución eficiente y transparente para los ciudadanos” (...). Esa cuestión, antes que ésta: “Izquierda o derecha”.