Sr. Director:
Con una Eucaristía presidida por el Papa Francisco, comenzaba el domingo 6 de octubre en El Vaticano la Asamblea Especial del Sínodo de los Obispos para la región Panamazónica, que hasta el próximo 27 de octubre reflexionará sobre nuevos caminos para la Iglesia y para una Ecología Integral.
El Papa nos recordaba en la homilía que la Iglesia no puede limitarse en modo alguno a una pastoral de “mantenimiento”, dirigida solo a los que ya conocen el Evangelio. El impulso misionero es una señal clara de una comunidad eclesial, porque la Iglesia siempre está en camino, siempre en salida, nunca cerrada en sí misma. Así, no con espíritu cobarde sino prudente, hemos de estar atentos, saber discernir, y ser sensibles a la novedad del espíritu para que no se apague el fuego de la misión.
El fuego de Dios no es devastador, sino calor que atrae y reúne en unidad. El fuego devorador, en cambio, se extiende cuando tratamos de sacar solo adelante las propias ideas y quemar lo diferente para uniformar todos y todo.