Sr. Director:

El actual Gobierno de España quiere que los monjes benedictinos de la Abadía de la Santa Cruz del Valle de los Caídos se marchen de ese lugar, y además pretende desacralizar su basílica.

Todo un despropósito para quien tiene dos dedos de frente y para quienes valoran el conjunto como un magnífico monumento para la reconciliación entre españoles.

Allí están los monjes  rezando y trabajando  en favor del progreso de España  y  del bien integral de todos los españoles,  sin hacer distingos entre los que son de un color o de otro,  porque lo que interesa es que reine  la concordia,  la paz,  la verdad,  la caridad  y  la esperanza para todos.

Sin embargo,  como decimos,  el Ministro de Política Territorial y Memoria Democrática del actual gobierno español,  ha asegurado  en una entrevista  que quiere que el  Valle  sea un centro laico,   lo cual supondría la salida de los monjes de la Abadía y,   en buena lógica,   la desacralización de la Basílica.

"Queremos que los monjes se vayan.  Estamos hablando con ellos y con las autoridades eclesiásticas.  El Valle debe ser un centro laico que sirva para explicar la guerra y lo que vino después.   No cabe que se queden"    ha manifestado el Sr. Ministro.

Recordemos que la inauguración del conjunto tuvo  lugar  el  1  de  abril  de  1959,   veinte años después de la guerra civil.

En los columbarios hay restos de combatientes de los dos bandos.

Es impreciso afirmar que el  Valle  lo mandó construir  Franco  como una especie de "premio" para los que habían ganado la terrible guerra civil.

¿No sería mejor  dejar  que  los muertos descansasen  ya  en  paz?

La Abadía es un edificio religioso porque fue consagrado para el servicio divino.

Junto a la Abadía se encuentra el cementerio de los monjes.

La basílica y la abadía  están comunicadas a través de un acceso privado  que cuenta con una gran puerta monumental de bronce.

El 27 de mayo de 1958,  el Papa Pío XII  emitió el breve pontificio  "Stat Crux"  por medio del cual se disponía todo lo oportuno para la erección inmediata del monasterio en la abadía.

El 17 de julio de 1958,  veinte monjes  llegados de Silos  emprendían  el  inicio  de la  nueva comunidad en el Valle. 

Por medio de la ley  20/2022  de 20 de octubre, de Memoria Democrática,  el Valle de los Caídos pasó a llamarse oficialmente  Valle de Cuelgamuros.

Como decimos,  se trata de un conjunto monumental  formado por una basílica dedicada al culto católico,  una abadía y una Cruz de 150 metros de altura,  asentada sobre la cumbre de un risco que domina todo el valle circundante,  con la peculiaridad de que  la basílica  es subterránea en su totalidad. 

¡Cuántas veces hemos dicho que  ni Europa  ni España  se pueden comprender  sin contar  con la fe ni con la cultura católica!

Sin embargo,  algunos no toleran el carácter religioso-cristiano de la vida de las personas y de los pueblos: ésta es la piedra de toque que puede darnos  tanto renombre  como tanto odio por parte de los que no aceptan objetivamente la realidad.