"Que se mueren los ricos y las mujeres de los pobres", era la solución a todos los problemas económicos en el tardofranquismo sindical. 

Ahora, hemos vuelto ahí. La vicepresidenta segunda, Yolanda 'fashion', ha dicho que piensa imponer la reducción de la jornada laboral, en principio desde las 40 horas semanales a las 38,5 y El País apoya la jugada asegurando, encuesta en mano, que la mayoría de los españoles están entusiasmados con la yolandera idea.

Para entendernos: que dos tercios de los españoles apoyan la reducción de jornada laboral de Yolanda. ¿Sólo? Me parecen poquísimos. Yo pensé que apoyarían tal cosa el 101 por 100. 

La verdad es que, en una encuesta o en un referéndum, todo depende de cómo hagas la pregunta y enseguida emerge el 'quiero trabajar menos y cobrar más'. Y yo también, Yolanda, pero verás, eso no es posible. El problema, es la baja competitividad de la economía española. Y mientras una economía no se vea apoyada por saltos tecnológicos de enjundia, debe trabajar mucho para competir en el mercado internacional. Y eso es, justamente, lo que necesita España.