- A los comunistas sólo se les derrota con tres armas:
- Con principios y con teoría, porque sus principios son homicidas y su teoría una castaña.
- Marginándoles políticamente: que no toquen poder alguno.
- Y cuando se pongan violentos -ya se están poniendo- se les detiene… con la violencia necesaria al propósito.
Decíamos ayer… que hay que parar a
Podemos. Ahora bien, tampoco basta la actitud del PSOE. Ahora mismo, si quieren orillar a Podemos, no basta con abstenerse: se precisa que
PSOE y PP sean un solo partido frente a los
nacionalismos de derechas e izquierdas y, sobre todo, frente a los peligrosos majaderos de
Pablito Iglesias.
Al comunista hay que orillarle o hacerle frente. Pero esto último por la fuerza.
Un grupo violento, no un grupo ultraizquierdista.
A los comunistas sólo se les derrota con tres armas:
En primer lugar,
con principios y con teoría, porque sus principios son homicidas y su teoría una castaña. Nada más grotesco que contemplar al pedante de Pablemos intentando pasar
por investigador universitario y por intelectual. Eso es muy divertido.
Marginándoles políticamente: que no toquen poder alguno. Por eso, el PSOE ha metido la pata: les ha permitido tocar poder en
comunidades autónomas y ayuntamientos por el cainismo de
Pedro Sánchez y su necio odio eterno al PP.
Y cuando los podemitas se pongan violentos -ya se están poniendo- se les detiene… con la violencia necesaria al propósito. Vulgo: a tortas.
Observarán, además, que
la historia del comunismo es la historia de la provocación violenta... hasta que el contrario emplea, mismamente, la violencia, legítima o no. Entonces se vuelven hacia la democracia.
Eulogio López
eulogio@hispanidad.com