- Por tu seguridad, pasa por caja.
- Por tu salud, pasa otra vez por caja.
- La cabra tira al monte y los verdes a la tiranía.
La alcaldesa de Madrid,
Manuela Carmena (
en la imagen), nuestra querida abuela, nos castiga con multas y
reducción de velocidad hasta los 70 kilómetros por hora. Lo hace por nuestro bien, que conste, porque la contaminación en el aire es tremenda. Ya saben,
por tu seguridad (o por tu salud), pase por caja
De hecho, en cuanto se han enterado de lo que ha hecho nuestra querida abuela se ha apresurado a notar, y a hacer notar, que efectivamente, se respira fatal en Madrid, y un médico del ramo (qué otra cosa puede decir un médico del ramo, se ha apresurado a aclararnos que la contaminación (que se vuelve a confundir con polución) ocasionará
trastornos respiratorios a go-go.
Yo no he notado nada pero seguramente es que tengo pulmones bien dotados, es decir, una excepción.
La terapia también es poco acertada, porque en la M-30 en las vías de acceso circular a 70 por hora probablemente ocasionen las suficientes retenciones como para que aumentara la producción de gases. Pero es igual, doña Carmena, quien, al parecer, a pesar de su edad provecta ha decidido no morirse jamás aprovecha para dos cosas:
- Saciar su egolatría pasado por una alcaldesa preocupada por su vecinos, oh sí.
- Sacar unos euros a quienes utilizan el coche para trabajar o para lo que les dé la gana. Todos ellos son burgueses y alguno de ellos fascista.
¡Qué gran alcaldesa tenemos! ¡Qué idiotas somos por aplaudirla! Ya saben: por tu seguridad, pasas por caja. Por tu salud, pasa otra vez por caja
Eulogio López
eulogio@hispanidad.com
