- El abogado más rico de España está muy preocupado: La Iglesia debe ofrecer unos "objetivos dignos".
- Lo que significa que el Fundador se equivocó en esto de los objetivos.
- Eran más bien indignos.
- Pero para eso está Garrigues. En dos patadas lo soluciona.
Don
Antonio Garrigues Walker (etiqueta negra, apostillaba Jaime Campmany), el abogado más rico de España es de los que, como
Hans Küng, no desean ser Papa para no perder el don de la infalibilidad.
Es también de los que piensan que "
los papas pasan, pero él permanece", razón por la cual
algunas instituciones católicas deseosas de ser alabadas por el mundo (ya saben, el primero de los grandes enemigos del alma: el mundo, el demonio y la carne).
Y no se crea, don Antonio, les atiende de forma muy diligente. Por ejemplo, acaba de publicar una Tercera en ABC. Su título: "
Francisco y El Mundo".
Menciona más a Francisco que El Mundo pero de humedades hablaremos luego.
Al Nuevo Orden Mundial (NOM) le vienen bien este tipo de personajes. Se dicen católicos, pero
católicos críticos, ojo, olvidándose de que Dios no busca críticos, sino discípulos (es verdad, don Antonio, siento decírselo, así sin anestesia: Dios es poco democrático).
En cualquier caso,
el beato Garrigues Walker etiqueta negra, lo expresa así: "El mundo cristiano representa una religión minoritaria". Curioso, ¿cuál será la religión mayoritaria para Garrigues? A lo mejor, el narcisismo.
Sigamos: "
pero es sin duda el grupo más influyente a nivel global". ¡Qué cosas!
Pero lo importante no es eso. Lo importante que la Iglesia de Francisco puede conseguir una "nueva grandeza, unos objetivos dignos". Lo cual significa que
, hasta la llegada de Francisco, la Iglesia no había contado con unos objetivos dignos. Pero nunca es tarde si la dicha es buena. Ahora tenemos a don Antonio,
que nos va a enseñar cuáles son los objetivos dignos para la Iglesia. La verdad es que Cristo no lo dejó claro, pero para eso tenemos a Garrigues.
Eulogio López
eulogio@hispanidad.com