Decíamos ayer… que los jueces de la Audiencia Provincial de Sevilla no han condenado a un Gobierno sino a un partido, el PSOE.
El PSOE es sinónimo de impunidad y latrocinio. Y encima presumen de honradez, porque los socialistas sólo se corrompen, como la vieja canción, “a beneficio de los huérfanos, los huérfanos y de los pobres de la capital”.
El caso de los 'eres' es mucho más grave que el de la Gürtel o cualquier otra corrupción del PP, en cantidad y calidad. En cantidad, como refleja la meme que corre por Internet.
Las cifras manejadas por la Gürtel se quedan cortas parangonadas con las de los ERES o con la del segundo caso de corrupción socialista: los cursos de formación.
No pasará nada tras la sentencia: la nota distintiva de los socialistas es la impunidad
En calidad, porque se trataba de dinero para los ‘pobres’, dinero púbico que acaba en sordidez privada. La derecha se corrompe con dinero privado, la izquierda es peor: se corrompe con dinero público. O como dijo Joaquín Leguina cuando el director general de la Guardia Civil desvió dinero destinado a los huérfanos de la Benemérita: eso es como si el párroco fuera el dueño del puticlub del pueblo.
El PSOE ha superado en corrupción al PP... y encima presume de honradez.
Y presume porque, al igual que con los eres, los socialistas se han acostumbrado a la impunidad. Se trata de negarlo todo, también las sentencias judiciales, y si llueve ya escampará: ellos seguirán dando lecciones de honradez.
El PSOE es el partido más corrupto de España. Ha convertido la corrupción en régimen consuetudinario. Y se quedan tan anchos porque, además, se sienten impunes.