- Es la oración para este momento de prueba.
- Don Juan de Austria no dialogó con el Erdogan de turno: se dieron a la violencia.
- Y de paso, salvaron a Europa.
- España sólo reconoce un tipo de guerra al que darle vueltas: las guerras civiles, cainitas, odiosas.
Fue un 7 de octubre cuando la escuadra española (ya veneciana y genovesa y papel), comandada por Juan de Austria, destroza a la fuerza naval turca que infestaba el Mediterráneo.
Lo de los musulmanes era la piratería y la esclavitud, además de una amenaza a la Europa cristiana por el este. España, a la que le había costado 700 largos años expulsar a los moros en el oeste, cerraba en un solo día el dominio naval del
Imperio Turco, allá en el Golfo de Lepanto muy cerca del Estrecho de Corinto, en el sur de Grecia.
Cualquier otro país se enorgullecería de esta gesta y celebraría la victoria. España no: España sólo reconoce un tipo de guerra al que darle vueltas:
las guerras civiles, cainitas, odiosas.
Además,
Lepanto no deja de ser una guerra de religión. Aquellos fachas reaccionarios que acompañaban a don Juan de Austria, en lugar de negociar con el
Erdogan de la época, se dieron a la violencia frente a una religión de paz, como es el islam.
Pablo Iglesias se hubiera situado a la salida del puerto para evitar, con resistencia pacífica prestada por la CUP, la salida de la antidemocrática flota. No muy delante claro, porque aquellos reaccionarios
no se detenían ante la resistencia pacífica. Unos salvajes, se lo digo yo.
Ahora bien, mientras tenía lugar el combate,
el Papa rezaba el Rosario. Es la oración de hace 1.000 años y es la oración de ahora mismo.
Primero, porque España no se entiende sin el amor a
Santa María. Segundo, porque la oración más eficaz de este momento de prueba para la Iglesia es el
Santo Rosario, una oración muy propia de la civilización del amor: resume en 20 misterios toda la doctrina cristiana
al tiempo ofrece ritmo y cadencia poética. Ascética y mística, si ustedes me entienden.
Día
7 de octubre: Nuestra Señora del Rosario, aniversario de la batalla de Lepanto.
Eulogio López
eulogio@hispanidad.com