• Porque si la masonería internacional logra tumbar al presidente electo de EEUU,  logrará tumbar también cualquier régimen.
  • Y acabará por convertir la democracia, cualquier democracia, en una burla.
E insisto: jamás un presidente electo de los Estados Unidos sugirió los ataques de Donald Trump (en la imagen). El Nuevo Orden Mundial (NOM), es decir, la nueva masonería internacional, está dispuesta a todo con tal de cargárselo. Lo ha intentado antes de que tomara posesión. Ahora lo intentan con el boicot a la formación de Gobierno. Por cierto, el único progre, el chico del Tesoro, ha pasado la prueba de las cámaras sin ningún problema: el único. Todo vale con tal de tumbar a Donald Trump, incluso crispar toda la diplomacia internacional y todo el bloqueo occidental, tanto en su versión económica como militar. Y lo malo es que si el NOM consigue derribar a Donald Trump yo, y alguno más, dejaré de creer en la democracia norteamericana. Y lo que es peor: si se deja caer a estos hombres, podría caer cualquier democracia en el mundo. El voto popular pasaría a ser meramente orientativo. Para mí que no se trata de una fruslería. Eulogio López eulogio@hispanidad.com