El ministro socialista y ex presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán (en la imagen), ha comparecido en el Supremo por el caso de los ERE's y ha dicho -la necesidad azuza el ingenio- eso tan bonito de que "no hubo un plan pero sí un gran fraude". Vamos, que en él no hubo dolo pero fracasó como controlador y, además, que el mal era sistémico.

Los tres colectivos que se benefician de los casos de corrupción, reales o inventados: políticos, jueces y editores
En cualquier caso, han sido los medios, y el PP, los de derechas, los que se han volcado con el caso de los ERE's, al igual que los de izquierdas y los políticos socialistas nos dan la pelmada con la trama Gürtel y Bárcenas. Y esto significa lo de siempre. En Hispanidad nos preocupa la corrupción pero nos preocupa mucho más la utilización espuria de la corrupción. Y ahí pecan, y se benefician, al menos, tres colectivos: los políticos, que ven la paja en el ojo ajeno; los jueces, para los que encausar a los políticos es una cuestión que otorga prestigio y distinción, y los editores, especialmente las televisiones, que se 'jartan' de ganar audiencia morbosa con los corruptos y con los que se quedan en presuntos y al final, resultan inocentes… que también los hay.
No estamos buscando justicia sino venganza. Y con ello, tampoco estamos reduciendo la corrupción sino incrementándola

Resultado: así no se lucha contra la corrupción ni por la justicia, sólo por la venganza. Falta eso tan olvidado de la "rectitud de intención", también conocida como ecuanimidad.

Eulogio López eulogio@hispanidad.com