• A veces, los gays son víctimas pero el lobby gay se está convirtiendo en verdugo.
  • Los homosexuales son víctimas de los fanáticos musulmanes y son verdugos de los cristianos.
  • Han conseguido censurar cualquier alusión a la homosexualidad que no sea laudatoria.
  • Y hasta la evidencia se ha vuelto censurable.
A veces, los gays son víctimas, como en Orlando, pero el orgullo gay (¿Orgullo de qué?) está convirtiendo al homosexualismo en verdugo de todo discrepante. Para ser exactos, el homosexualismo se ha convertido en víctima de los musulmanes fanáticos y en verdugo de los cristianos. El LGTB, que dice luchar contra la opresión, aprovecha todo el potencial del Estado -fiscalía, jueces, policías y legisladores, todos ello sometido al imperio de lo políticamente correcto-, para condenar a los cristianos al silencio. Basta con repetir lo que dice el Catecismo de la Iglesia católica sobre homosexualidad para que caiga sobre el osado todo el peso de la ley. En el mejor de los casos (artículo 510 del Código Penal) te censuran, en el peor, acabas en el trullo por delitos de odio. Al parecer, últimamente todos odiamos mucho a todos. Es más, no puedes repetir la doctrina del Catecismo de la Iglesia (puntos 2357-59), porque estarás manifestando odio al gay. De esta forma, se cierra la boca, y con amenaza de cárcel, a la mayoría cristiana (con todo el cacao mental que se quiera, pero que se confiesan cristianos). Y es inútil que intentes distinguir, como en cualquier discurso intelectual, entre el ataque a la homosexualidad y el ataque al homosexual. Con ello se anula toda disquisición intelectual. Ya sabes: si atacas a la pobreza estás atacando al pobre, si atacas a la ignorancia estás atacando al ignorante. Ni tan siquiera te atrevas a describir lo evidente o lo científica, médica y económicamente desmontable. Serás un homófobo. En cualquier caso, como recordaba el Papa Francisco, una cosa son los gays y otra el lobby gay. Y por cierto, en los carteles que ha colgado el Ayuntamiento por todo el centro de Madrid para el evento MADO (Madrid Orgullo) se señala que el contenido de estas fiestas está integrado por: MÚSICA, DERECHOS, CULTURA, ARTE Y DIVERSIDAD. Se les ha olvidado el más importante que es el sexo, a cuyo reclamo viene toda la tropa nacional e internacional. Y que conste que algunos pensamos, por eso estamos contra la homosexualidad (no contra el homosexual) que ese sexo no es sexo, es otra cosa. Eulogio López eulogio@hispanidad.com