- El presidente norteamericano no es 'terminator', es 'negociator': el gran Donald cede ante Xi Jinping.
- Y ante Japón y Corea del Sur.
- En China, el presidente norteamericano ni se ha atrevido a hablar de libertad religiosa.
- Eso sí, ha firmado acuerdos comerciales.
- Encima, el amigo Jinping aprovechó para blasonar de democracia. Precisamente él, el mayor tirano del mundo.
- Y Japón y Corea del Sur intentan detener el uso de la fuerza por parte de Trump.
- De palabra son muy duros con Kim Jong-un, pero este sigue utilizando a Corea del Norte.
- Trump ni tan siquiera se plantea la gran tarea del Occidente cristiano. Que Asia, sobre todo China, abandone a su dios: el dinero.
Asia es el continente más poblado del mundo.
Donald Trump ha recorrido Asia en el viaje más largo de su año presidencial y en mi opinión
ha cosechado un sonoro fracaso.
Ha demostrado que no es
terminator, como le presentan demócratas y republicanos vergonzantes, tipo
John McCain. Pero no, tenía razón
Carlos Slim: No es terminator, es negociator.
Al final, frente a la mayor tiranía del mundo, la china de
Xi Jinping, Trump se acobardó y acabó firmando acuerdos comerciales. ¿Históricos? No he conocido ningún acuerdo comercial firmado por políticos, al que no se le asigne ese apellido: histórico.
En cualquier caso,
Pekín se ha reído de Trump porque los chinos jugaban en su terreno:
el dinero y la falta de valores. Por ejemplo, Trump no habló de derechos y libertades, tampoco de
libertad religiosa, sobre todo para los cristianos: eso es lo que más habría molestado de
Xi Jinping. Pero no lo hizo.
Y así, el amigo Jinping aprovechó para blasonar de democracia. Precisamente
él, el mayor tirano del mundo.
Y Japón y Corea del Sur intentan detener el uso de la fuerza por parte de
Trump.
De palabra son muy duros con
Kim Jong-un, pero los chinos continúan utilizando a Corea del Norte como alfil contra Occidente.
Y el señor
Donald Trump ni tan siquiera se plantea la gran tarea del Occidente cristiano: que Asia, sobre todo China, abandone a su dios: el dinero.
Eulogio López
eulogio@hispanidad.com