- El presidente norteamericano se despide recreando la guerra fría.
- Y, sobre todo, apunta el camino hacia la tiranía global.
- El Gobierno planetario es una de las marcas del Nuevo Orden Mundial (NOM).
- Al tiempo, Washington estropea la guerra de Siria e Irak, cuna del yihadismo.
- Es como si el NOM necesitara al terrorismo islámico para imponer sus tesis.
- Y desde la Casa Blanca se prepara la carrera de Michelle Obama. Es decir, de Barack Obama.
- Es el tiempo de las dinastías republicanas: los Bush, los Clinton, los Obama…
Jamás un presidente norteamericano aprovechó sus últimos días en la
Casa Blanca para enmendarle el plan a su sucesor.
Obama sí (
en la imagen junto a Putin): ahora ha resucitado la guerra fría,
expulsando a no sé cuántos diplomáticos, como en los viejos tiempos. No porque les acuse de espionaje sino porque
los rusos hicieron que Trump ganara las elecciones a
Hillary Clinton. O al menos, esa es la especie que se lanza al viento.
Y así, no dimite por haber permitido que
los rusos sabotearan los ordenadores norteamericanos. Por cierto, de 'hackear' un ordenador a conseguir el pucherazo hay un camino largo, salvo que estés falsificando los resultados una vez hecho el recuento.
En cualquier caso, alguien -siempre hay un alguien- puede creer que los rusos beneficiaron, si es que lo hicieron, a
Donald Trump, pero no más de lo que Occidente, el Nuevo Orden Mundial (NOM),
apoyó el triunfo de Hillary con total desvergüenza.
Lo importante: Obama es una marioneta del Nuevo Orden Mundial (NOM), que está dando pasos de gigante hacia su sueño más señero:
el Gobierno mundial, es decir, la religión universal y… la dictadura global.
Obama es un fiel peón del NOM pero creo que se está saltando todas las normas, incluidas las de la buena educación para asfixiar a
Donald Trump. Que es un Patán, claro está, pero que coincide con
Vladimir Putin, otro personaje que debería limar aristas, es algo que el NOM no soporta:
ambos tienen convicciones. Y un tipo con convicciones no es un hombre-masa, fácilmente manipulable. Obama y Hillary son manipulables, son
progres.
Al tiempo,
Obama estropea todos los avances de Rusia en la guerra Siria, esto es, estropea la eficaz lucha contra el terrorismo islámico que lleva a cabo Moscú. No nos engañemos,
el NOM no está contra el yihadismo. Es más, le encanta el terrorismo- fundamentalismo porque
representa la excusa ideal para un Gobierno mundial tiránico, con una
religión de corte sincretista y con un Gobierno mundial ferozmente anticristiano.
Y la última razón para que Obama perpetre tantas estupideces cuando quedan tres semanas para que se largue: prepara a su señora,
Michelle Obama, como candidata a la Casa Blanca. Ya saben, hemos pasado de la monarquía a las dinastías republicanas.
¡Viva
Putin, muera Obama!
Eulogio López
eulogio@hispanidad.com
