Me encantan los no-periodistas porque dicen las cosas a la pata la llana, mientras los periodistas nos hemos vuelto unos pedantes de mucho cuidado. Vean la deliciosa carta que nos envía Jaime Fomperosa, en comentario a los discursos, cada día más interminables y prepotentes, de don Pedro Sánchez, ayer, cuando intentó consagrar la censura de prensa y el insulto a Cristo y la Rey… que de eso se trataba, no de otra cosa. 

Dice así don Jaime: "A  ver si nos lo explica a los ciudadanos. Vd. no hace nada más que repetir “democracia plena”. La democracia es la libre elección de los ciudadanos para elegir a sus gobernantes, ¿y los ciudadanos ya no pueden expresarse cuando el gobierno lo hace mal? Lo cierto es que Vd. se contradice asimismo y sus palabras encubren que Vd. pretende ser un tirano, y someter a los ciudadanos a sus ordenes, negándoles su libertad de expresarse, y esto Sr. Presidente no es democracia ni libertad, y ya llevamos numerosos decretos que limitan nuestra libertad, y si continuamos, mejor dicho, si continua por este camino, pronto seremos esclavos de la mayor esclavitud que haya existido nunca. Libertad sí, no libertinaje ni tiranos”. 

En ninguna crónica periodística he visto mejor explicada la sesión de ayer en el Congreso.