Según El País, convertido en el diario del Sanchismo a pesar de parte de sus redactores, el extremismo religioso ha lanzado una ofensiva en todo el mundo contra los homosexuales.. Ahí va, en portada, a todo trapo: "Una ofensiva ultraconservadora apunta a las personas LGTBI en el mundo". Y como no habían metido a los curas de por medio, añade: "El ascenso de la ultraderecha y del discurso de odio en las democracias se suma a una oleada de extremismo religioso que tiene en el punto de mira los avances del colectivo, que celebra el Día Internacional del Orgullo". 

Es El País, ateo por nacimiento, quien decide cuál es la religión aceptable y cuál debe se rechazada, el que decide cuándo odia el personal y, por el mismo precio, qué actitudes pueden aceptarse y cuáles deben ser perseguidas, por ultras.

Hay mucho victimismo en el mundo LGTB

La verdad es que el planteamiento de una conspiración mundial, mitad religiosa mitad política resulta un poquito exagerado, pero en pleno Orgullo Gay caben estas y otras muchas hipérboles. Pero podría ser que algún día, alguien tenga que reflexionar sobre si la tal persecución de los LGTBI existe realmente. Al menos en España.