La deriva de Netflix es más que evidente: en España ya ha empezado a perder usuarios ... por el fin de las cuentas compartidas, o sea, por la subida de precios. E ideológicamente no le va mucho mejor a la blasfema y progre plataforma, que ha llegado incluso a cancelar 'Sound of Freedom', que denuncia el tráfico de niños, mientras promociona 'Cuties' que cosifica sexualmente a niñas y adolescentes.

Ahora, le ha dado a la compañía liderada Reed Hastings por lanzar el siguiente mensaje a los más pequeños, que aparece fijado en sus pantallas: "No creo en Jesús". 

¿Es acaso necesario que un niño reciba tal información?