Mbappé ya es jugador del Real Madrid. Yo creo que no debería serlo.
De entrada, es un engreído, lo que le convierte en un personaje conflictivo en el vestuario. De salida, su vida no resulta ejemplar, es de las que no se puede exhibir ante los menores, que son la parte fundamental de un club de fútbol.
Florentino: la excelencia se gana, no se compra, la virtud se trabaja no se exhibe
Estamos ante otro error de Florentino Pérez. Kylian Mbappé no pinta nada en el Real Madrid, desde ningún punto de vista.
Un equipo que ha ganado 15 copas de Europa tiene un espíritu... al que no pertenece la estrella francesa... aunque no tengo claro que pertenezca al propio Florentino, el hombre que ha terminado con el Madridismo, después de que retirase la cruz cristiana que entroniza el escudo del club en sus competiciones patrocinadas por países musulmanes. ¡Una vergüenza de don Florentino!, perteneciente a esa raza de empresarios españoles que no son ni morales ni inmorales: son algo peor: amorales.
Además, señor Pérez Rodríguez: la excelencia se gana, no se compra, la virtud se trabaja no se exhibe.
El madridismo debe ser democrático, surgir de abajo. Con Pérez se ha convertido en una plutocracia
El florentinismo es plutocracia. Pérez es presidente indiscutido del Real Madrid porque ha marcado unas normas según la cuales sólo un multimillonario puede pagar los avales que se exigen para competir por la Presidencia del Real Madrid. El madridismo debe ser democrático, surgir desde abajo. Con Pérez se ha convertido en una plutocracia.