El exministro socialista de Industria y Energía, por cierto, uno de los culpables del gran derroche, el de las primas a las renovables, el juguetito ecológico que más caro nos está saliendo a los españoles, figura en la foto, tomada en el sur de Francia, con Carles Puigdemont. Pepe Montilla ha sido líder del socialismo catalán, presidente de la Generalitat, miembro del Gobierno Zapatero y ahora vive de buenas rentas públicas. Por ejemplo, es consejero de Enagás.
Representa al socialismo moderado, pues ya estaba en danza con el Felipismo aunque ascendió con el Zapaterismo y ahora se ha convertido en ideólogo del Sanchismo.
Vamos a ver, ¿que es un exministro blanqueando al prófugo Puigdemont, que en cuanto vuelva a España debe ser detenido? Es la prueba del gran paripé socialista. Sánchez ya tiene firmado su acuerdo Frankenstein, con comunistas, separatistas catalanes, separatistas vasos y hasta bilduetarras desde el mismísimo 23 de julio por la noche. Lo de las conversaciones difíciles, líneas rojas, etc., es eso: un paripé.
Que ahora el moderado Montilla acuda a hacerse una foto con el prófugo Puigdemont, es decir, un delincuente buscado por la justicia española... pues ya me contarán.
Por cierto, ¿se acuerdan de cuando huyó ‘Puchi’ en un maletero y se dijo que había que respetar la legislación europea pero que se trataría, desde el Gobierno, de modificar el sistema de la euroorden, porque con ‘Puchi’ se había demostrado que era un pitorreo? Pues bien, nadie ha pedido que se modifique la euroorden en el único sentido posible: entre países socios, en el seno de la UE, solo cabe que si un Gobierno miembro dicta una orden de detención... se detenga al interdicto que luego, no se apuren contará con todas las garantías jurídicas en su país de origen. Pero no que llevemos un lustro con el ‘Puchi’ burlándose de España desde Bélgica y ahora convertido, encima, por la egolatría de Sánchez, que se niega a pactar con el PP y sólo lo hace con quienes odian al país que preside, en el personaje halagado.
A eso obedece la presencia de Montilla en la foto del sur de Francia: y es una vergüenza.