La hierba, verde siempre será,
es una realidad inmutable,
con una única salvedad,
cuando el estío y la falta de agua,
su color, en amarillo cambiará.
Y aunque parezca que se agosta,
después del frio invierno,
cuya agua y nieve la alimentará,
volverá a surgir lozana, cuando
la primavera vuelva a retornar.
Y la veremos fresca y verde,
llenando valles, montes y jardines,
con ese su color espectacular;
en un ciclo tras otro sin parar,
hasta que el creador de tal maravilla,
decida cuando y cómo, será su final.
 
Pasa lo mismo con la humanidad;
perpetuamente será la misma,
siempre compuesta estará,
y hombre y mujer serán,
en una inmutable realidad,
que nadie podrá cambiar,
y sobre la cual todo girará.
mujer y hombre, hombre y mujer,
con sus diferencias y su igualdad
vivirán, y así se eternizarán.
Aquí no cabe otra realidad,
ni la llamada de género igual,
ni siquiera la que llaman virtual,
que una entelequia, son y serán.