Olaf Scholz ha presumido, pese a la crisis económica y política que vive su país. “Si una nación industrializada es ejemplo de invertir en su futuro es Alemania”, ha señalado en el Foro Económico Mundial que se celebra en Davos (Suiza).
Es curioso, porque el canciller alemán ha obviado varios aspectos relacionados con la inversión en el futuro de su país. Entre ellos, el cierre nuclear, que ha disparado el uso del gas natural y ¡hasta del carbón!, y por tanto, también las emisiones de CO2, y que también ha supuesto un mayor precio de la energía. Además, el socialdemócrata no ha mencionado la crisis del automóvil y las decenas de miles de despidos que está provocando (Volkswagen, Ford, Bosch...), justo cuando le queda poco más de un mes de las elecciones.
Recuerden que los alemanes votarán el próximo 23 de febrero y por ahora, los sondeos no son especialmente favorables para el SPD. El partido conservador CDU/CSU se mantiene en cabeza, con el 31% de la intención de voto; seguido del SPD (16%); mientras Los Verdes y AfD siguen creciendo.
En paralelo, Scholz ha apostado por más subvenciones y créditos al 10%. ¡Olé! Asimismo, se ha mostrado partidario de “preservar los principios fundamentales del orden internacional”, ante la vuelta de Donald Trump a la Casa Blanca. Eso sí, ha destacado que “EEUU es nuestro aliado más cercano fuera de Europa. Y haré todo lo que esté en mi poder para que siga así”, aunque cree que “Trump y su gobierno mantendrán al mundo en vilo: en política energética y climática (al hilo de la retirada de EEUU del Acuerdo de París por parte de Trump, ante lo que que ya ha respondido Ursula von der Leyen), en política comercial, en política exterior y de seguridad y en muchas otras áreas”.
Wir müssen alles dafür tun, die fundamentalen Prinzipien internationaler Ordnung zu erhalten. Und das fundamentalste Prinzip ist die Unverletzlichkeit von Grenzen. Übrigens gilt das immer und überall.#WEF2025
— Olaf Scholz (@OlafScholz) January 21, 2025