Isabel Rodríguez, Carolina Darias y Diana Morant, tres mujeres dando un espectáculo lamentable: el viscoso rosario de halagos al líder, el progresista Pedro Sánchez. Al menos, Yolandísima se alaba a sí misma.
Dejando a un lado la propaganda de Rodríguez, que ya empieza a cansar hasta a los habituales a las ruedas de prensa del Consejo de Ministros, la sesión del martes 14 de junio se distinguió por dos iniciativas:
-La ley de equidad sanitaria, de la titular del ministerio, Carolina Darias
-Y las nuevas iniciativas de financiación de la investigación científica de la titular de investigación, Diana Morant, una mujer que parece recién llegada del espacio si consideramos que la investigación aeroespacial constituye su principal objetivo.
Habla Morant de "un momento revolucionario para la ciencia", pero lo cierto es que se ha convertido en el miembro del gabinete (perdón miembra) con más retrasos a la hora de cumplir los plazos de su financiación a la investigación científica. Es igual lo que importa no es la realidad, sino la propaganda.
Seguramente la medida más importante aprobada ayer por el Ejecutivo fue la ley de equidad sanitaria. Hasta por tres veces Darias repitió lo del gobierno progresista y confieso que me tocó entender el contenido de la norma. Ahora que lo he conseguido, se lo resumo en una línea: se trata de aniquilar a la sanidad privada. A partir de ahora, el ministerio va a intentar que, aún con un Insalud desbordado, no se transfiera actividad sanitaria hacia lo privado. No necesito entrar en las consecuencias, porque son evidentes, pero sí recordar que ampliar la Sanidad pública, restándole actividad a la privada... supondrá un fuerte incremento del gasto sanitario. Y esto porque puede que la Sanidad pública sea todo lo igualitario que ustedes quieran, pero es más cara.