A pocos días de las elecciones autonómicas y locales, los candidatos a la presidencia de la Comunidad de Madrid de los partidos mayoritarios se dieron cita en el plató de Telemadrid para debatir sobre sus programas electorales.

Las encuestas dan ganadora a Ayuso, aunque parece que un puñado de votos decidirá si la popular consigue la absoluta o necesitará a Monasterio para gobernar. Por el lado de la izquierda aún hay esperanza, pero la cosa está fracturada: Jacinto puede quedarse sin representación en la Asamblea y un posible sorpasso de Mónica García a Lobato, atemoriza a los socialistas. Con este panorama tan abierto y teniendo en cuenta el peso de Madrid en la política nacional, las elecciones a la Comunidad del próximo 28 de mayo cobran especial relevancia.

No faltó ningún candidato: la actual presidenta de Madrid y candidata por el Partido Popular, Isabel Díaz Ayuso, que recibió casi todos los ataques y supo 'pasar' de muchos de ellos; Rocío Monasterio, candidata de Vox, que recriminó a Ayuso muchos pactos a los que se llegaron hace dos años y que a día de hoy se siguen sin cumplir ; Juan Lobato, del PSOE, que adoptó una postura más políticamente correcta dentro de la izquierda, no propuso nada pero no paró de comparar a Madrid dentro del contexto europeo; Mónica García, candidata de Más Madrid, centrada en atacar a Ayuso, con un perfil mucho más histriónico que el de Lobato y con el foco en la sanidad, ya saben: es médica y madre; y Alejandra Jacinto, por Unidas Podemos, en línea con Mónica atacando a la candidata del PP, todo su programa se basó en proponer la creación de 'cosas' públicas, daba igual para qué. Todos intervinieron durante los cinco bloques temáticos moderados por el presentador Víctor Arribas. 

El debate no pasará a la historia por ser el más vibrante, pero sí dejó buenos momentos.

Como hemos comentado, Monasterio reprochó promesas incumplidas a Ayuso. Primero contra la inseguridad, la candidata de Vox relacionó una vez más a los Menas con la delincuencia, lo que le valió un reproche en bloque del resto de candidatos: "Aquí tenemos negacionistas de que la sanidad va mal y negacionistas de la inseguridad. Yo he de decir que me equivoque... cuando dije que cada mena en Madrid nos costaba 4.700 euros al mes. Me equivoqué totalmente. No era verdad. Resulta que en Madrid cada mena nos cuesta 6.400 euros al mes". Monasterio también cargó contra la Ley LGTBIQ de Cifuentes y contra Ayuso por no derogarla, aunque el plan para eliminar la autodeterminación de género siga adelante: "Además de sacar a Sánchez, hay que sacar las leyes de la izquierda. No puede ser que la señor Ayuso sea la precursora de Irene Montero con la ley trans".

También fue un gran momento de la candidata de Vox cuando salió a atacar a Lobato, el candidato socialista criticaba a Ayuso por la deuda pública de la CAM, Monasterio no pudo aguantar y le espetó: "Da vergüenza que usted, siendo socialista, hable de deuda", reprochándole que siendo del partido de Sánchez, que va a dejar la deuda pública más elevada que hemos visto los españoles, hable de reducir la regional. 

Lobato al finalizar el debate se quejó de que "nadie proponía nada": ojo, igual que él, porque propuso "regenerar con contundencia Madrid con sensibilidad, con solvencia y con la experiencia de gestión en las alcaldías socialistas, tenemos un programa que afronta retos con propuestas concretas, serias y solventes, que generan ilusión, ver que esta alternativa existe", aunque no detalló ninguna de esas brillantes propuestas. 

Lobato considera que: "Hay que apostar por innovación, digitalización, biotecnología. Hace falta tener un modelo de consenso, reteniendo talento, con una apuesta por la industria, que está ranqueante, y por unos servicios públicos que dé oportunidades, recuperando el respeto y la educación", queda claro, ¿verdad?

Como hemos apuntado, Lobato se mantuvo con un perfil políticamente correcto, atacando a Ayuso pero mostrando que él es la opción moderada de la izquierda. Todo lo contrario a la tendencia adoptada por Mónica y Alejandra. 

Mónica García propuso "vacaciones para los autónomos y permisos de lactancia para las autónomas" y se atrevió a decir que "No es que la Comunidad no funcione, es que Ayuso no funciona. O mejor dicho, funciona para unos pocos", "Hay unos pocos que viven muy por encima de sus posibilidades a costa del resto de madrileños que vivimos por debajo de nuestras posibilidades". Sí, han leído bien, Mónica se incluye entre los madrileños que viven por debajo de sus posibilidades: "Tax The rich" gritó García, suponemos que lo decía por el bono térmico. 

Por supuesto tenía que dejar claro que es médica y madre por lo que en el debate hizo varios símiles entre economía y sanidad. En el caso de la vivienda, la candidata de Más Madrid aseguró que los planes de incentivos a la vivienda del Gobierno de Ayuso son como: "dar azúcar a un diabético". 

Pero no podemos terminar este repaso al debate sin hablar de Alejandra Jacinto, la candidata de Unidas Podemos, Izquierda Unida y Alianza Verde. Era su primer debate y protagonizó muchas de las polémicas del debate de ayer. Primero, y sin que nadie se lo pidiera, 'presumió' por haber llegado al debate en taxi. Cuidado Alejandra, que Edmundo Bal, cuando era candidato a la Comunidad de Madrid, ya usó esa técnica en el debate electoral del 2019, presumiendo de moto, y la jugada no le salió nada bien. 

Jacinto expuso sus propuestas, todas basadas en lo público, crear 'cosas', en general públicas, daba igual para qué, Alejandra quiere una empresa de energía pública, un banco público, un Tinder público… y hasta "un Glovo público que compita con Amazon, para poder subirte ese menú que te apetece comerte en tu casa". 

 

Y casi al final del debate, se 'despelotó', concretamente se desató la chaqueta que llevó cerrada durante el programa y dejó ver su camisa que llevaba el rostro de Tomás Díaz Ayuso, el hermano de la presidenta, acusándole de las supuestas modidas que se llevó en la compra de mascarillas, algo que la justicia ya ha archivado en varias ocasiones. 

Todo ello mientras acusaba también a Ayuso de ser la responsable de las muertes por Covid durante la pandemia. Ayusó tiró de ironía y le recordó que murieron "millones de personas" por el Covid pero que "en la Comunidad de Madrid ha sido Ayuso". Pero Jacinto insistía y le quiso dar el libro del ex consejero de Políticas Sociales, Igualdad y Natalidad de la Comunidad de Madrid, Alberto Reyero, de Ciudadanos: Morirán de forma indigna. Ayuso, muy tranquila, le respondió: "no invada mi espacio". 

Sin duda, y como recordarán, Jacinto es una especialista en escraches, y lo dejó totalmente claro ayer.