El colaborador de Hispanidad, José Ramón de Pablos, uno de los personajes que mejor se conoce la Constitución de 1978, firmó en Hispanidad un artículo, el martes 19, que conviene releer con atención, titulado: "¿Y si Sánchez no recibe el encargo del Rey?".
No era teoría, era práctica posible. Es lo que todo el felipismo y el aznarismo le están aconsejando, ahora mismo, al Jefe del Estado.
Al mismo tiempo, la mejor respuesta a la cabezonería de Sánchez, que no acepta pactar con el PP, es ir de nuevo a las elecciones... y sin mucha esperanza de que cambien la cosas. Cambiaron el 28 de mayo y cincuenta días después volvían a su origen.
Digamos que este momento político crucial, tiene el siguiente calendario:
1.Sesión de investidura de Alberto Núñez Feijóo.
Ojo, que podría perder la primera votación y ganar la segunda, ser elegido con más votos que el contrario. Sí, ya sé que es difícil porque el acuerdo entre el PSOE y los orcos de Mordor (ERC, Jutns, Bildu y PNV) está ya cerrado desde el 24 de julio.
Ahora bien, Sánchez está nervioso, por algo será. Además, ha vuelto a mentirles con la amnistía y, aunque saben que con nadie podrán conseguir lo que con él, lo cierto es que hasta los más recalcitrantes indepes, sobre todo catalanes, empiezan a mosquearse.
2.Que el jefe del Estado no designe a Pedro Sánchez para formar Gobierno y fuerce el calendario hasta que haya que convocar nuevas elecciones.
Con esto, se arriesga a que Sánchez le chantajee, una vez más, alentando el sentimiento de la III República, que tanto gusta a sus socios y a él mismo, quien, en su delirio, está, empeñado en ser jefe de Gobierno y jefe del Estado,
Ahora bien, unas nuevas elecciones pueden ser la única forma de echar a Pedro Sánchez de la Moncloa, algo de lo que son partidarios... hasta muchos socialistas.