Teresa Ribera y Yolanda Díaz (más conocida como Yolandísima) están en campaña de cara al 23-J, pese a que esta no arrancará oficialmente hasta el 7 de julio, san Fermín. La vicepresidenta ecológica y la vicepresidenta laboral se presentarán a las elecciones (no así, la económica, Nadia Calviño), aunque una por el PSOE y otra por Sumar, y ahora se puede ver cómo al hilo del polémico boicot a las fresas de Huelva en Alemania echar un pulso para ver quién tiene más caradura, ataca más al PP y es más ecologista.

La vicepresidenta ecológica está usando mucho Twitter para su particular campaña y ya ha empezado a ver sus frutos: será la número dos de la lista socialista por Madrid. Y también utiliza el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico: distribuyó un argumentario interno para defender la acusación que lanzó la asociación Campact (la cual está muy alineada al Foro de Davos... y su “no tendrás nada y serás feliz”) contra las fresas de Huelva, como informa Libre Mercado.

Ribera insiste en que la ley de regadíos de Andalucía “pone en serio peligro los acuíferos y el espacio natural de Doñana” y ha lamentado que los agricultores se ven “amenazados por una duda reputacional inducida precisamente por ese comportamiento gamberro

En ese argumentario se refiere que “el Miteco no valora las iniciativas del Parlamento de un Estado Miembro de la UE, ni opina sobre si es conveniente o no que dicha visita se produzca en periodo electoral”, en alusión al viaje de diputados alemanes a Madrid y de la suspensión de su visita a Doñana. También se dice que “el Miteco se ratifica en su posición: exige la retirada inmediata de la ley que seca Doñana y planteará un recurso suspensivo ante el Tribunal Constitucional si la proposición de ley se aprueba”. En esto último se ve claramente su ataque a una ley propuesta por la Junta de Andalucía que preside el pepero Juan Manuel Moreno Bonilla.

La cosa no queda ahí. Ribera, al llegar a la III Cumbre de Autoconsumo y Comunidades Energéticas de la Unión Española Fotovoltaica (UNEF), ha insistido en que la ley de regadíos de Andalucía “pone en serio peligro los acuíferos y el espacio natural de Doñana” y en que hay una “campaña de acoso a Doñana por parte del PP y de Vox en el Parlamento Andaluz”. Ha lamentado que los agricultores se ven “amenazados por una duda reputacional inducida precisamente por ese comportamiento gamberro”. Y encima, ha subrayado que tanto el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, como ella misma han defendido “siempre” los intereses de los agricultores, ¿en serio?, entonces ¿por qué la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (ASAJA) ha pedido su dimisión de Ribera? Además, ha cuestionado a Castilla y León -región gobernada por PP y Vox- por la “falta de respeto” a las normas europeas al hilo de la resolución sobre saneamiento ganadero que flexibilizaba la orden del Ministerio para el control de la tuberculosis bovina.

Por si todo esto se queda corto, Ribera ha tuiteado que el BCE ha publicado una guía sobre riesgos financieros vinculados a medio ambiente y cambio climático, y que ha alertado de que “la destrucción de la biodiversidad destruye la economía europea”. Asimismo, ha referido la necesidad de restaurar los ecosistemas y que la ley de restauración de la naturaleza se debate en el Parlamento Europeo y el Partido Popular Europeo (del que forma parte el PP) está mostrando “un vergonzoso rechazo, negándose incluso a negociar”.

Estaría bien que Ribera se interesara más por las emisiones de CO2 de Alemania, que ha disparado el uso del carbón y del gas, a pesar de que los Verdes están en el Gobierno. Esto para Ribera, gran enemiga del CO2, debería ser más grave que el tema de las fresas de Huelva y la proposición de ley de regadíos de la Junta de Andalucía. Y como se puede ver en Twitter, refiriendo datos de las emisiones de 2021, ya hay quien propone que se mande una delegación de diputados españoles a Alemania. 

A la vicepresidenta ecológica le ha querido pisar algo de terreno Yolandísima, que viajó a Doñana y se reunió con organizaciones ecologistas y agricultores, y se atrevió a culpar al PP de “crimen ecológico”. Y no sólo lo ha hecho en sus declaraciones a los medios de comunicación, sino también a través de Twitter: refirió que el proyecto del PP es hipotecar el futuro de la gente y de nuestro entorno natural”, que “el negacionismo climático de Feijóo y Moreno Bonilla está perjudicando a la agricultura, a los recursos naturales y a la reputación de nuestro país” y que “ser patriota es cumplir la ley y cuidar lo que es de todos y todas. Cuidar el país es cuidar a la gente y cuidar a nuestra naturaleza”. Además, viajó con el eurodiputado y ecologista Ernest Urtasun, que ha sido elegido como portavoz de la campaña de Sumar.