El Gobierno social-comunista ha exigido por carta al Hermano Mayor de la Hermandad de La Macarena de Sevilla el traslado de los restos de los generales Gonzalo Queipo de Llano y Francisco Bohórquez --que respaldaron el alzamiento del bando nacional durante la Guerra Civil--, que se encuentran desde el año 1951 bajo el camarín de la Virgen de la Basílica de la Esperanza Macarena en Sevilla.
El secretario de Estado de Memoria Democrática, Fernando Martínez López, hace esta petición para cumplir con la Ley de Memoria Democrática que entró en vigor el pasado viernes.
En la misiva se pide que se proceda, "a la mayor brevedad", a la exhumación y traslado de los restos porque la entrada en vigor de la Ley obliga a retirar los restos de la basílica de La Macarena en Sevilla, recoge Antena 3.
Además, se recuerda que la norma establece que los restos mortales de dirigentes "del golpe militar de 1936 no podrán ser ni permanecer inhumados en un lugar preeminente de acceso público, distinto a un cementerio, que pueda favorecer la realización de actos públicos de exaltación, enaltecimiento o conmemoración de las violaciones de derechos humanos cometidas durante la Guerra o la Dictadura".
Esto establecen los artículos 5 y 6 del Concordato entre el Estado español y la Santa Sede de 1979:
5. Los lugares de culto tienen garantizada su inviolabilidad con arreglo a las Leyes.No podrán ser demolidos sin ser previamente privados de su carácter sagrado. En caso de su expropiación forzosa será antes oída la Autoridad Eclesiástica competente.
6. El Estado respeta y protege la inviolabilidad de los archivos, registros y demás documentos pertenecientes a la Conferencia Episcopal Española, a las Curias Episcopales, a las Curias de 1os Superiores Mayores de las Órdenes y Congregaciones religiosas, a las Parroquias y a otras Instituciones y Entidades eclesiásticas.
Hasta el momento, no se conoce reacción alguna por parte de la iglesia, ante la orden gubernamental, aunque la cofradía de la Esperanza Macarena ha dicho que cumplirá la ley.