Atención: Segunda carta del apóstol, más bien líder, don Pedro, que no San Pedro, a la ciudadanía, también conocido como "los españoles: No se lo pierdan, en su totalidad manifiesta. Así va:

Mi esposa y yo hemos tenido conocimiento hoy mismo, a través de los medios de comunicación, de la citación a Begoña como investigada el próximo día 5 de julio. Esta decisión se anuncia sólo cinco días antes de que se celebren elecciones al Parlamento Europeo, lo cual resulta extraño. Habitualmente, se ha seguido la regla no escrita de no dictar resoluciones susceptibles de condicionar el desarrollo normal de una campaña. electoral y, por tanto, el voto de los ciudadanos. En este caso, resulta evidente que esta práctica no se ha respetado. Dejo al lector extraer sus propias conclusiones. Quisiera trasladarle que ambos estamos absolutamente tranquilos. No hay nada detrás de esta acusación, sólo un zafio montaje impulsado por las asociaciones ultraderechistas demandantes. 

Con todo, hay una lectura política que me veo en la obligación de compartir con usted. Como ya recordará, en mi anterior carta denuncié la deriva de una coalición reaccionaria capitaneada por el Sr. Feijóo y el Sr. Abascal -o por el Sr. Abascal y el Sr. Feijóo, tanto monta monta tanto-, para usar todos los medios a su alcance con el fin de quebrarme en el plano político y personal. Su objetivo es que yo renuncie, que dimita. Incluso, como supimos ayer, tratar de forzar mi salida de la Presidencia del Gobierno con una moción de censura mediante una alianza contra natura. Todo les vale. 

Lo que no lograron en las urnas, pretenden alcanzarlo de manera espuria. También sabía que, conforme aumentara la frustración y la impotencia de esta coalición reaccionaria, el ritmo de la máquina del fango no iba a parar, sino a acelerarse. Ante esta certeza, me pregunté si merecía la pena o no continuar en el ejercicio de mis responsabilidades. Quiero decirle que mi decisión de continuar al frente de la Presidencia del Gobierno es más firme que nunca. Que la tarea que tiene el Gobierno de coalición progresista es más necesaria que nunca. Nuestro horizonte permanece inalterable: consolidar la pujanza del crecimiento económico y la creación de empleo, como hoy acabamos de conocen redistribuir los frutos de ese crecimiento entre la clase media y los trabajadores para luchar contra la mayor de las injusticias, que es la desigualdad; regenerar la vida democrática reivindicando el juego limpio por encima del fango que algunos pretenden esparcir, avanzar en derechos y en libertades sin dar un paso atrás; y contribuir a la paz en el mundo, con especial atención a Ucrania y Palestina.

Estos próximos días, usted será testigo de una cuidada coreografía diseñada por la coalición ultraderechista para intentar condicionar las elecciones y debilitar al Gobierno. Begoña y yo sabemos perfectamente por qué la atacan. Ninguno de los dos somos ingenuos. Lo hacen porque es mi pareja. Ella es una mujer trabajadora y honesta que reivindica su derecho a trabajar sin renunciar a ello por las responsabilidades de su marido. Derecho que yo defiendo en mi vida familiar y por el que trabajo como presidente del Gobierno de España para garantizar que hombres y mujeres tengamos las mismas oportunidades y los mismos derechos. 

Estos días leerá y escuchará usted mucho ruido y aún más furia en tabloides digitales nacidos para propagar bulos, en platós de tertulias televisivas y radiofónicas al servicio de amplificar esa desinformación, y en tribunas donde se rasgarán las vestiduras el Sr. Feijóo y el Sr. Abascal. Todo, mentira. Un gran bulo. Uno más. En lo que respecta a mi, no le quepa duda de que no me quebrarán. Y, dado que tratan de interferir en el resultado electoral del próximo día 9 de junio, ojalá sus promotores -el Sr. Feijóo y el Sr. Abascal-, encuentren la respuesta que merecen en las urnas: condena y rechazo a sus malas artes. Quedan unos días de ruido antes de las elecciones y unos pocos más antes del verano. Pero también quedan más de tres años de Gobierno, de progreso y de avances".

Lo siento pero este tipo de documentos históricos hay que leerlos enteros, en su totalidad manifiesta, y el señor presidente del Gobierno no se caracteriza por su capacidad para el compendio, ni hablando ni escribiendo.

Antes de nada, lo que más me ha gustado: Sánchez habla de su contribución "a la paz en el mundo". La última vez que oí eso de la paz en el mundo fue ya hace mucho tiempo, a una concursante a Miss Universo. Y no sé si saben, pero es lo que Feijóo y Abascal se quieren cargar, en alianza "contra natura" con Puigdemont. Ojo al dato: quien por siete votos -votos de don Carles Puigdemont- tiene el c. roto, hablando de alianzas contra natura con Puchi.

Sánchez habla de su contribución "a la paz en el mundo". No sé si saben pero es lo que Feijóo y Abascal se quieren cargar, con alianza "contra natura" con Puigdemont

El estilo es de lo más personal. Es más sólo haba de su persona, al tiempo que contribuye a esa principio sanchista que nos ha llevado al guerracivilismo: el que no piense como yo es un ultra. Es la historia del pensamiento único, el gran virus de la democracia. En el progresismo, la diversidad hace referencia a los animales y a las plantas, nunca a las personas ni a la cualidad constitutiva de éstas: pensar.

En cualquier caso, resumamos la misiva: el presidente utiliza la citación judicial de su mujer para ganar las elecciones europeas del próximo domingo y aprovecha para propinarle una bofetada al juez Peinado. Eso sí, mirando hacia otro lado. El juez es el ejecutor de la llamada a declaración de su esposa -¿cómo se atreve?- además de una marioneta de la ola ultrareaccionaria. Por supuesto, Vox es ultra, por supuesto, el PP también. Demócratas sólo hay uno: Pedro Sánchez.

Asesinato de Borja Villacís. Si Sánchez insiste en seguir, a lo mejor preside una España negra, pero no por reaccionaria, sino porque la violencia mafiosa reine en sus calles

Pero en todo caso, resulta que, con esto, el apóstol don Pedro ha abierto la veda contra los jueces. Respetando la separación de poderes, 'of course', pero convirtiendo a los jueces, que no hablan sino por la sentencias, como no digan dueñas. Ahora sí que conviene que el PP continue bloqueando, 'sine die', la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ). Ya sabemos lo que ocurrió con la renovación del Tribunal Constitucional.

Pero el mensaje más importante es el otro. Toda la carta se puede resumir en que los ciudadanos, especialmente los ultras que no votan a Sánchez, deben perder toda esperanza de que Sánchez dimita. Tras sus cinco días de retiro domiciliario, el apóstol Sánchez llegó a la conclusión de que su deber es permanecer como guía espiritual de un país lanzado a la deriva por la ola reaccionaria que recorre el mundo. Por eso, perded toda esperanza, malditos fascistas: yo, sigo, por toda la legislatura, y aceptaré cualquier tipo de chantaje de grupos minoritarios para mantenerme en Moncloa, claro que sí.

Por cierto, la carta de Sánchez coincidía con el asesinato a tiro limpio de Borja Villacís, hermano de Begoña Villacís la que fuera vicealcalde de Madrid y 'hombre fuerte' de Ciudadanos cuando Ciudadanos era fuerte. Un asesinato al estilo mafioso, muy similar al atentado que sufriera el político Vidal-Cuadras. Quiero decir que si Sánchez insiste en seguir, a lo mejor preside una España negra pero no por reaccionaria, sino porque la violencia mafiosa reine en las calles.