Marejada interna en el PSOE por el acuerdo entre el PSC y ERC para investir 'president' de Cataluña al socialista Salvador Illa, un pacto, claro está, ‘bendecido' por Pedro Sánchez, quien lo ve además como una oportunidad para que España crezca en la senda federalista, una senda que es anticonstitucional, como ha explicado Hispanidad.
Y es que el acuerdo supone, prácticamente, la independencia económica de facto, al ceder a Cataluña la recaudación de todos los impuestos, en contra de la solidaridad con el resto de españoles, entre otras muchas cosas (como expandir embajadas catalanas, eliminar completamente al castellano de la enseñanza, etc).
Esto ha hecho despertar el recelo de algunos barones regionales, cosa impensable hasta hace bien poco. Aunque habrá que ver hasta qué punto esos recelos son eficaces, es decir, si toman alguna medida eficaz contra ese pacto en Cataluña, que afecte al secretario general del PSOE.
Entre esos barones descontentos, además del castellano-manchego Emiliano García Page, está el expresidente de Aragón y actual secretario general del PSOE en esa Comunidad Autónoma, Javier Lambán, a quien el citado pacto le "pone los pelos de punta". Porque "hablar de financiación singular, que Cataluña se quede con todo lo que se recauda en esa comunidad y restar al resto 20.000 millones que son de los ciudadanos, tiene que ver poco con la igualdad y la solidaridad, que son los valores del PSOE del que me afilié". Y anticipa efectos electorales en las elecciones autonómicas de 2027: "Me temo que el resultado catastrófico del 2023 van a ser una broma comparados con el del 2027".
Otro barón socialista -y prosanchista- que se ha manifestado en contra del pacto entre el PSC y ERC ha sido el asturiano Adrián Barbón, presidente del Principado en este momento, quien señaló que se opone a que ninguna comunidad autónoma salga del régimen fiscal común “como asturiano, como socialista y como presidente”. Y no descartó llevarlo a los tribunales.
Por cierto que Barbón tiene un lío interno en su partido en Asturias, con un sector crítico que se concentra a las 12:30 horas de este viernes para cuestionar su liderazgo y "pedir democracia interna".
Pero volviendo a Cataluña, hay que destacar dos cosas más: una, el derroche de Salvador Illa en asesores, duplicando los que tiene la presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso (PP); y dos, el derroche para las arcas públicas que supone que el ya 'expresident' de la Generalitat, Pere Aragonés, vaya a disfrutar de un sueldo de 9.078,5 euros brutos al mes por el hecho de haber sido eso, president de la Generalitat.
Y todavía hay quien niega que haya casta política en Cataluña.