El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se encuentra de viaje oficial en Chile donde ha inaugurado el foro empresarial España-Chile.
En la inauguración del foro, Sánchez ha dicho: ”España y Chile aspiran a participar de ese cambio global de paradigma económico, el desarrollo económico debe ser más justo, debería ser más igualitario entre hombres y mujeres, debería ser más abierto y multilateral, debería basarse en una energía mucho más barata y abundante, como son las energías renovables".
Sánchez ha añadido: "Son tiempos de transformaciones estructurales y de disrupciones sociales como consecuencia de esas transformaciones. Y precisamente por eso, también son tiempos de grandes oportunidades. Y creo que Chile y España disponen hoy de las mejores herramientas para poder aprovecharlos y llevarlos a efecto: tenemos las capacidades, tenemos el talento, tenemos los recursos naturales y sobre todo la ambición climática y social para aprovechar este momento sin duda histórico para nuestras sociedades. Y por encima de todo, tenemos un tejido productivo capaz de aportar un enorme valor añadido a esas transformaciones".
"Les animo a aprovechar este foro en el que dos países hermanos, unidos por tantos lazos, quieren afrontar un futuro lleno de oportunidades”, ha concluido el presidente.
Nótese la cantidad de palabras vacías, lugares comunes y fanatismo climático del discurso del presidente español, mientras a miles de kilómetros de allí, en España, amnistía a unos golpistas rompiendo el principio de que todos los españoles somos iguales ante ella ley.