Tres años de Pablo Casado al frente del PP. Conste que su triunfo en las primarias sobre Sáenz de Santamaría fue un triunfo sobre la masonería de derechas que regía en el PP de Mariano y Soraya. Por ahí, bien.
Lo cierto es que su ascenso a la Presidencia del Partido resultó un soplo de aire fresco, sobre todo cuando uno contempla la alternativa: para llorar. Ahora bien…
Tres años después, don Pablo nos sale hueco. Pablo ‘Hueco’ Casado . El de Génova reinventa el centro-reformismo y nos dice que en su partido caben todos: conservadores, liberales, humanistas cristianos -esto de los humanos-cristianos es una nueva catalogación de lo más divertida- y hasta socialdemócratas: ¡Menudo lío! De nuevo, el camarote de los hermanos Marx, matrimonio de contradicciones y aversión a elegir, porque uno, por más que se empeñe, señor Casado, no puede ser liberal y socialdemócrata. Ni de broma. Casar contrarios no es pluralismo: es esquizofrenia. De nuevo, el Partido Popular convertido en una maquinaria de poder, en un órdago: u obtienes el poder o no eres nada, y cuando obtienes el poder no sirve para nada. Bueno, sirve para que tu te engolfes en Moncloa.
El PP regresa al voto útil pero lo peor es que regresa al mal menor. Otra vez desnortado y descristianizado. No hay nada como carecer de ideario para terminar sin ideas
El PP ha regresado al voto útil pero lo peor es que regresa al mal menor. Con ‘Hueco’ Casado vuelve a ser un partido desnortado por descristianizado.
Su gran ventaja, es que Vox continúa sin cuajar. Su alma nacionalista sigue pesando más que su alma cristiana.
Casar contrarios no es pluralismo: es esquizofrenia
Mientras siga así, el PP tendrá techo. Si Santiago Abascal despierta, puede convertirse en el primer partido de la oposición o de España, pero empiezo a sospechar que Abascal tiene miedo a despertar. Le asusta que le expulsen del corral de la “democracia”, regido por quienes se han cargado la democracia porque son incapaces de aceptar rectitud de intención en el prójimo
La gran ventaja de Casado es que Vox continúa sin cuajar. Su alma nacionalista sigue pesando más que su alma cristiana. Mientras siga así, tendrá techo y el PP mantendrá distancias
En el entretanto, desde Madrid, convertida de nuevo en capital del PP, la presidenta Isabel Díaz Ayuso ejerce de alternativa a sosito Casado. Creo que se equivocó: lo que atrae de Ayuso no es su ideario sino su carácter, no es el fondo, sino la forma, no es lo que propone sino lo que critica del sanchismo, tan insensato y tan ridículo. Ayuso ha demostrado que sabe ganar elecciones al sanchismo y que, además, sus críticas a la izquierda son inequívocas y contundentes, descubren su liberticidio y su tendencia al ridículo, como en el lenguaje inclusivo.
Isabel Díaz Ayuso ejerce de alternativa al ‘soso Casado’. Pero cuidado: lo que atrae de Ayuso no es su ideario sino su carácter, no es el fondo, sino la forma
Ahora bien, un líder tiene que construir, En eso, Ayuso todavía tiene que recorrer un buen trecho. Si pretende sustituir a Casado corre el peligro de provocar una crisis justo en el momento en que Casado se coloca en cabeza de las encuestas. Bueno, salvo en el CIS. No comprendo por qué razón.