Empezamos esta crónica semanal de Hispanoamérica  —en la que hacemos especial énfasis en la defensa de la vida, la familia natural, la libertad de enseñanza y el bien común, es decir, los principios no negociables establecidos por Benedicto XVI—  en Costa Rica, para defender la ley natural frente a la ideología de género  y la cultura abortista. 

En ese país, en el marco de las celebración por las fiestas patrias, el obispo de Tilarán-Liberia, Mons. Manuel Eugenio Salazar Mora, hizo un llamamiento a “defender la soberanía nacional” de organismos internacionales que “quieren imponer, a la mayoría de costarricenses, sus ideas, sus costumbres y sus pensamientos”, recoge Aciprensa. 

“El pueblo es el soberano, no unos funcionarios públicos internacionales. Por eso, hagamos todo de nuestra parte por buscar que seamos una República democrática, independiente, lo más posible”, señaló el Prelado.

El mensaje de Mons. Salazar Mora se dio tras las recomendaciones que hizo Tlaleng Mofokeng, relatora especial de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) sobre salud física y mental, luego de su visita de 10 días al país centroamericano. De acuerdo a un comunicado emitido por la ONU, la funcionaria instó a llevar a cabo una reforma legal “para despenalizar el aborto” y adecuarse a las recomendaciones de organismos internacionales como el suyo.

Recientemente, la Conferencia Episcopal costarricense había pedido defender la soberanía de “imposiciones extranjeras e ideologías perversas que someten, especialmente al no nacido, a recibir un trato como ser humano de segunda clase”.

La CIDH recuerda que que la Convención Americana sobre Derechos Humanos reconoce el derecho de todas las personas a la libertad de conciencia y religión, incluyendo "la libertad de profesar y divulgar su religión y sus creencias, individual o colectivamente, tanto en público como en privado

Nos ocupamos ahora de Nicaragua, país sometido a la dictadura de Daniel Ortega, que viene ejerciendo una persecución contra la iglesia católica. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), organismo dentro de la OEA, ha difundido un comunicado exhortando a la dictadura a que cese sus "constantes ataques contra la Iglesia católica y sus integrantes", recoge Religión en Libertad. 

La CIDH considera que que la persecución contra entidades católicas "continúa agudizándose en un contexto de cierre del espacio cívico y democrático", con casos de "detención arbitraria, encarcelamiento y expulsión del país de sacerdotes y religiosas, sin garantizar el debido proceso, así como la expropiación de sus bienes".

La CIDH además reconoce que el tema "tiene particular importancia en un país con una mayoría de población que profesa la religión católica como Nicaragua, donde la política estatal para la supresión del espacio cívico ha resultado también en la afectación de la libertad religiosa de su población", agregó.

La CIDH también se muestra preocupada por el total de ocho sacerdotes que "permanecen privados de libertad. Entre ellos, monseñor Rolando Álvarez, quien se encontraría en condiciones deplorables de detención, incomunicado y con afectaciones a su salud, como quedó evidenciado en la visita de sus familiares el pasado 25 de marzo”. 

El gobierno de Cuba cuenta con un historial extenso y probado de represión y actualmente hay más de mil presos políticos y de conciencia en la isla

Por su parte, el Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) se opuso esta semana a la candidatura de la República de Cuba al Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas y exhortó a la comunidad internacional a “no permitir el ingreso de un Estado extremadamente violador”, informó el organismo. 

“Sería un grave mensaje de impunidad. El gobierno de Cuba cuenta con un historial extenso y probado de represión y actualmente hay más de mil presos políticos y de conciencia en la isla”, afirmó el OCDH.

Para la organización, “Estados Unidos, Canadá, la Unión Europea y las democracias latinoamericanas deberían impedir que Cuba vuelva a ocupar un asiento en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, habida cuenta del empeoramiento generalizado de la situación en la isla, sobre todo después de las protestas populares de 2021”. El pleno para la elección de los miembros del Consejo está previsto para el próximo 10 de octubre en Naciones Unidas.

Y en Venezuela, la opositora a la dictadura chavista María Corina Machado trataba de dar algo de esperanza a los venezolanos, machacados desde hace décadas por el comunismo: