Cumbre de la OTAN en Lituania, en el patio trasero de Bielorrusia. La orgía de vanidades tiene esta vez por referente a Joe Biden, quien acaba de 'alegrar' el conflicto con el envío de letales bombas de racimo al ejército ucraniano.

El esquema de la Alianza sigue siendo el mismo, que ya podemos llamar 'modelo Ucrania': Occidente vacía sus arsenales, mientras Ucrania pone los muertos. Por si fuera poco, en lugar de atraerse a Rusia hacia Occidente, todos los líderes europeos, al son de Biden, entregan a Rusia en manos de China. 

Y a río revuelto, ganancia de pescadores: el turco Erdogan aprobará la entrada de Suecia en la OTAN a cambio, claro está, de que Turquía entre en la Unión Europea, con el clarísimo propósito de islamizar Europa. Y no se crean, porque Turquía son más de 85 millones de habitantes. Si logra incorporarse al complejo Bruselas, su peso sería determinante, incluso más que el alemán.