Decíamos en Hispanidad que tanto Donald Trump, como su vicepresidente, J.D. Vance, han sido designados como candidatos de los republicanos para las elecciones presidenciales de noviembre, por lo que la campaña electoral da comienzo de manera oficial. Aunque la realidad es bien distinta, puesto que tanto Trump como Biden llevan meses en campaña.
Por lo que las posturas en muchos asuntos están muy claras, por ejemplo el demócrata ha dejado clara su obsesión abortera y de extensión del progresismo, ahora lo denuncia Friday Fax: "Biden quiere imponer el mandato homosexual y transgénero en todo el mundo"
“Hoy anuncio que Estados Unidos está actualizando su propia interpretación del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos. Este es uno de los tratados clave que compromete a las naciones a defender los derechos universales. Eso significa que, a partir de ahora, Estados Unidos considera que la orientación sexual y la identidad de género están cubiertas por este tratado”, dijo el Secretario de Estado de Estados Unidos, Anthony Blinken, durante un evento de celebración del mes del orgullo LGTBIQ+.
Al parecer el Departamento de Estado de Estados Unidos “actualizará” su interpretación de un tratado internacional vinculante sobre derechos civiles para incluir cuestiones LGTBIQ+ y blindarlas: “Los derechos de las personas LGBTQI+ son derechos humanos y nuestro gobierno tiene la responsabilidad de defenderlos y promoverlos, aquí y en todas partes”, afirmó Blinken.
Blinken explicó que se trataba de una “interpretación bien fundamentada” del tratado de derechos civiles de la ONU ratificado por Estados Unidos en 1991. Algo curioso por que dicho tratado no incluye una sola mención a las cuestiones homosexuales/trans, y es que dichas cuestiones nunca se entendieron como parte del tratado.
Este cambio incluirá la promoción del matrimonio homosexual, así como la despenalización de la actividad homosexual, la presión mediante sanciones económicas contra países que no apoyen la agenda LGTBIQ+, algo que el propio Blinken reconoció que ya están haciendo .
En definitiva, se trata de provocar cambios sociales y políticos forzados, mediante coacción y finanaciando el activismo LGTBIQ+: “Defender estos derechos es crucial para salvaguardar y acelerar nuestra renovación en casa. Nuestra capacidad para defender los derechos humanos y la democracia a nivel internacional también está directamente relacionada con nuestra fortaleza en estos frentes aquí en nuestro propio país”.