Decíamos en Hispanidad que, mientras en España Irene Montero sigue aprobando barbaridades, Estados Unidos se convierte en el modelo a seguir, promulgando leyes para prohibir los cambios de sexo.
En concreto hablamos de estados republicanos, y el último en unirse ha sido Iowa. La encargada de firmar la ley ha sido la gobernadora republicana, Kim Reynolds.
Se han promulgado dos leyes. Una impide a los médicos ejecutar mutilaciones genitales o tratamientos hormonales en menores de edad. La otra prohíbe a los niños entrar en baños o vestuarios de los colegios que no se correspondan con su sexo biológico.
Desde el gobierno del estado aseguran que estas leyes eran necesarias para proteger la seguridad de los niños, por un lado cuando utilizan los baños escolares, y por otro para evitar que los menores tomen deciones médicas que son irreversibles y de las que se pueden arrepentir.
Entre los tratamientos que quedan prohibidos encontramos: los bloqueadores de la pubertad, la terapia hormonal y las cirugías y mutilaciones genitales.
Iowa se une a Florida, Alabama, Arizona, Arkansas, Dakota del Sur, Mississippi, Tennessee y Utah en promulgar este tipo de medidas.