Tras el fallo del Tribunal Supremo de Estados Unidos, en el que sus magistrados apostaban por la vida, en Hispanidad, hemos dicho que la batalla comenzaba ahora. El acoso a los centros provida, la violencia de los abortistas, el progresismo reventando el Estado de Derecho, todo con el silencio del Presidente Biden, que, junto a los demócratas, pretende burlar la sentencia del Tribunal Supremo por las vías legislativa, judicial… y violenta, hacen que la lucha por la vida esté a la orden del día.
Una nueva iniciativa abortera se ha hecho pública, la Dra. Meg Autry, ginecóloga y profesora de la Universidad de California San Francisco, ha anunciado la puesta en marcha de un proyecto para contruir una clínica abortista flotante en el Golfo de México.
La idea es abrir una clínica abortista a bordo de un barco en aguas federales, para que no esté al alcance de las leyes estatales, y que ofrezca abortos quirúrgicos en el primer trimestre y anticoncepción. Autry dijo que su equipo legal cree que hay una franja de agua federal donde los proveedores con licencia podrían realizar abortos de manera segura y legal fuera del alcance de las leyes estatales.
Así, su plan es que las mujeres en los estados del sur vayan a la costa, y cojan un barco que les lleve a la clínica flotante. El proyecto está dirigido sobre todo a las mujeres que viven en estados del sur de Estados Unidos, como Alabama, Mississippi, Luisiana, Texas o Florida, puesto que son las zonas donde las leyes prohíben o son muy restrictivas con el aborto. "Este es un acceso más cercano y más rápido para algunas personas, particularmente para los trabajadores que viven en la parte más al sur de estos estados”, dijo Autry.
“Ha habido un asalto a los derechos reproductivos en nuestro país y soy una defensora de toda la vida de la salud reproductiva y la elección. Tenemos que crear opciones y ser reflexivos y creativos para ayudar a las personas en estados restrictivos a obtener la atención médica que merecen”, declaró Autry en una entrevista a The Associated Press. Por ahora, el proyecto está intentando recaudar fondos a través de la organización "PRROWESS".