Como comentamos la semana pasada en Hispanidad, la elección de vicepresidente por Kamala Harris era inminente y así ha ocurrido. Y, los pronósticos se han cumplido dado que ha elegido uno de los nombres que, como indicábamos, estaba en la terna final. Se trata del gobernador de Minnesota, Tim Walz.
Pero, ¿quién es Tim Walz? Timothy James Walz nació hace 60 años en West Point, en el Estado de Nebraska. Hijo de Darlene Rose Reiman, ama de casa y de James F. Walz, profesor de colegio y veterano de la Guerra de Correa. Si bien sus padres eran católicos, Walz es luterano y miembro de la Iglesia Evangélica Luterana de América, conocida por ser pionera en la ordenación de mujeres sacerdotes y por sus posiciones favorables al aborto y la ideología LGTBI. Walz creció en Valentine, Nebraska, pero cuando estaba en el instituto a su padre le diagnosticaron un cáncer de pulmón y la familia se trasladó a Butte, en el mismo Estado. Se graduó en el instituto de la localidad en 1984, año de fallecimiento de su padre, y tras ello comenzó a trabajar en la fabricación de aparatos de bronceado y sirvió en la Guardia Nacional.
Ya en su época de docente fue un marcado activista político y en 1999 se convirtió en asesor de la primera alianza gay-heterosexual del colegio
Más tarde, comenzó sus estudios universitarios para seguir los pasos de su padre y convertirse en profesor de escuela, graduándose en 1989 en Ciencias Sociales en el Chadron State College, también en Nebraska. Ese mismo año, se trasladó a China, donde trabajó durante un año en labores docentes para la ONG WorldTeach. Un año después, regresaría a Nebraska para seguir con su carrera docente, y allí conoció a su esposa, también profesora, Gwen Whipple. Se casaron en 1994, y se trasladaron a vivir a Mankato, Minnesota, el estado natal de su esposa, donde comenzó a dar clases en el Instituto de Mankato Oeste como profesor de Geografía y entrenador de fútbol americano. Ya en esta época fue un marcado activista político y en 1999 se convirtió en asesor de la primera alianza gay-heterosexual del colegio. Amplió su formación obteniendo un máster en liderazgo educativo por la Universidad Estatal de Minnesota en 2001. En 2006 pidió una excedencia en el colegio para comenzar su carrera política como congresista por Minnesota. Ocupó el cargo entre 2007 y 2019, destacó como miembro del caucus de igualdad LGTB y recibió una valoración del 100% -la máxima- por Planned Parenthood, la organización abortista de referencia en Estados Unidos. En enero de 2019, tomó posesión como gobernador de Minnesota, cargo para el que fue reelegido en 2022, y que ocupa en la actualidad. A pesar de que Minnesota siempre ha sido un feudo demócrata y un símbolo para el partido, dado que no han perdido allí una elección presidencial desde 1972, es más en las presidenciales de 1984 Ronald Reagan en su histórica victoria, ganó 49 de los 50 Estados, con la excepción de Minnesota, lo cierto es que Walz no ha sido un gobernador especialmente popular y no fue elegido por grandes márgenes en ambas elecciones.
Su mandato al frente del ejecutivo estatal ha destacado por una agenda progresista radical, habiendo legalizado el cannabis y apoyado decisivamente el aborto. En 2023, Walz firmó la Ley de Protección de Opciones Reproductivas, que protege el acceso al aborto y la anticoncepción, así como la Ley de Defensa de la Libertad Reproductiva, que prohíbe a las agencias estatales "hacer cumplir citaciones, órdenes de arresto y solicitudes de extradición de otros estados" para personas que viajan a Minnesota para realizar un aborto. Adoptó dicha normativa para erigirse en paladín de la defensa del aborto, como respuesta a los Estados republicanos que adoptaron medidas contrarias al aborto tras la eliminación de Roe contra Wade por el Tribunal Supremo.
La elección de Walz demuestra cómo el Medio Oeste, y en especial los antiguos Estados demócratas de Wisconsin, Michigan y Pensilvania, conocidos históricamente como el “blue wall”, el muro azul, por el color de los demócratas, han pasado a ser los más decisivos, al comenzar a ser disputados tras la irrupción del trumpismo, que ha recogido muchos votos de antiguos votantes demócratas de perfil trabajador desencantados con la formación progresista.
Siempre quiso erigirse en paladín de la defensa del aborto, como respuesta a los Estados republicanos que adoptaron medidas contrarias al aborto
Bajo la apariencia de hombre amable y campechano que quiere dibujar la progresía mediática, se esconde un auténtico radical. Hasta el punto que su designación ha sido ensalzada por el senador Bernie Sanders, líder intelectual de la facción más radical de izquierda de los demócratas.
Ciertamente, la elección de Walz por Kamala Harris recuerda mucho a cuando en 2008 Barack Obama eligió al entonces senador Joe Biden como candidato a vicepresidente.
Sin embargo, la elección de Walz tiene sus luces y sombras. Sin duda, su perfil puede resultar competitivo para los Estados clave del Medio Oeste de Wisconsin, Michigan y Pensilvania, donde Kamala Harris difícilmente puede conectar con los votantes, y mientras que Harris está apelando a los votos de las minorías raciales, en especial de la afroamericana, Walz puede ayudar a arañar votos en el electorado blanco, el talón de Aquiles de los demócratas.
Por el contrario, existen otros puntos negativos de Walz a efectos electorales. En esencia, su Estado Minnesota no es decisivo para las elecciones, es un desconocido para el electorado a nivel general y es una absoluta incógnita cómo funcionará en un campaña a nivel nacional, y al tener ya 60 años, los mismos que cumplirá Harris en el mes de octubre, el ticket demócrata no cuenta con ningún perfil que aporte juventud y vitalidad a la campaña.
Será interesante analizar la lucha entre vicepresidentes de Walz y el republicano J.D. Vance, máxime cuando ambos pertenecen a Estados del Medio Oeste y tratarán de pelear por el mismo electorado.