La pasada semana contábamos en Hispanidad, que Planned Parenthood se iba de Tennessee, después del fallo del Tribunal Supremo que derogaba la protección legal del aborto en Estados Unidos, el Estado tomó medidas muy restrictivas contra el aborto, y el negocio cesaba su actividad.
Pero no es un caso aislado: según la organización provida Operation Rescue, al menos 50 clínicas abortistas ha dejado de hacer abortos o se han visto obligadas a cerrar por completo su negocio. Se espera que más de la mitad de Estados prohíban el aborto, por lo que en los próximos días y semanas, más clínicas echarán el cierre. Y es que por todos es sabido que el aborto es un negocio muy siniestro y cobarde, pero muy lucrativo, y este tipo de clínicas venden que su negocio no es el aborto y que se preocupan por la salud de las mujeres y la atención médica, pero a la vista del recuentro, no parece ser cierto.
Según informa aciprensa, el cierre de clínicas de aborto sería en los siguientes Estados: Alabama: 4 cierres; Arkansas: 2 cierres; Arizona: 4 cierres; Georgia: 1 cierre; Kentucky: 2 cierres; Michigan: 1 cierre; Missouri: 1 cierre; Ohio: 10 cierres; Carolina del Sur: 3 cierres; Tennessee: 3 cierres; Texas: 14 cierres; Wisconsin: 4 cierres; y Wyoming: 1 cierre.
Estos cierres y el fallo del Tribunal Supremo, ha hecho que algunos comercios hayan limitado la venta de la píldora del día después ante la masiva demanda de estos fármacos, que representan el aborto químico, mucho más numeroso e igualmente letal, y que representa el verdadero aborto de este siglo. Tal es la demanda, que Twitter y Facebook se han visto obligados a prohibir la publicación de anuncios de la píldora del Día Después (PDD), tranquilos, siguen siendo igual de progres e igual de pro-aborto, pero es que es ilegal la venta de fármacos entre usuarios.