En El Salvador, el actual presidente, Nayib Bukele, está aplicando una política de guerra sin cuartel contra las bandas criminales, que campaban a sus anchas por todo el país.
Esta política le ha valido ser reelegido presidente con uno de los mayores porcentajes de votos que se recuerda en un país democrático, con en torno a un 85% de los votos.
Y también le ha valido al presidente salvadoreño porcentajes de aprobación del 92% entre sus conciudadanos
Sin embargo, según una información de El Periódico, la Fiscalía de la Audiencia Nacional ha hecho una especie de enmienda a las políticas de Bukele al recomendar que un pandillero salvadoreño no sea extraditado a su país ya que -a juicio de la Fiscalía- "la situación actual" en el país centroamericano "resulta ser un compendio de todas las vulneraciones posibles de derechos procesales fundamentales" y que existe un "estado penitenciario calamitoso".
Estaría bien que la Fiscalía de la Audiencia nacional preguntase a los salvadoreños su opinión sobre las políticas de Bukele. Igual se lleva una gran sorpresa...