Si la semana pasada denunciábamos en Hispanidad que, a pesar de la revocación de los mandatos de vacunación obligatoria por parte del Senado de Estados Unidos, la Administración Biden anunció que el presidente utilizaría su veto presidencial para que su plan de vacunación obligatoria para empresas de más de cien empleados siguiera vigente, esta semana nuevamente debemos advertir de otro ataque más a la libertad en la primera potencia mundial. La Cámara de Representantes de EEUU ha aprobado la Ley de Modernización de la Infraestructura de Inmunización.
El doctor Ben Carson, gloria de la medicina y del colectivo agroamericano, vio truncada su carrera y destruida su imagen pública cuando se declaró cristiano y provida
De superar el trámite del Senado y entrar en vigor, la normativa supondrá una notable expansión de las bases de datos utilizadas por los departamentos públicos de salud para recopilar información acerca del historial de vacunación de los estadounidenses.
La progresía se ha lanzado a defender que esta medida nada tiene que ver con la vacunación obligatoria y la pandemia del Covid-19, pero lo cierto es que la congresista demócrata Annie Kuster, quien ha presentado el proyecto de ley, afirmó en noviembre que su legislación podría ser utilizada “para identificar áreas con bajas tasas de vacunación”. En plata, se podría utilizar para señalar públicamente a los no vacunados.
La Cámara de Representantes de EEUU ha aprobado la Ley de Modernización de la Infraestructura de Inmunización o HR 550. De superar el trámite del Senado y entrar en vigor, la normativa supondrá una notable expansión de las bases de datos utilizadas por los departamentos públicos de salud para recopilar información acerca del historial de vacunación de los estadounidenses
El grupo médico Stand for Health Freedom ha denunciado que “lo que esta norma supondrá es un mayor acceso de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), la agencia nacional de salud pública de Estados Unidos, a los datos de inmunización, y para eliminar la financiación federal a aquellos Estados que se nieguen a aceptar las recomendaciones del CDC”.
Sobre la nueva legislación, se ha pronunciado en una entrevista en Fox News, el doctor afroamericano Ben Carson, quien ha afirmado que se encuentra preocupado por los planes para dotar de 400 millones de dólares a la denominada “base federal de vacunación”. En palabras de Carson, “esta normativa es el reflejo de que los gobiernos tienen una tendencia a crecer, infiltrarse y controlar a la población”.
El doctor Carson cuenta con una de las trayectorias más destacadas en el ámbito médico. Con apenas 33 años, se convirtió en director de neurocirugía pediátrica del Centro Infantil del Hospital Johns Hopkins de Baltimore, siendo el jefe de neurocirugía pediátrica más joven de Estados Unidos. Participó en el primer procedimiento de separación de siameses, y recibió la medalla presidencial a la libertad en 2008. Fue considerado como uno de los grandes hombres de su tiempo y un icono para el colectivo afroamericano, hasta que comenzó a manifestar públicamente su fe cristiana y valores conservadores. A partir de entonces, fue vilipendiado por la progresía mediática. En el año 2016, fue candidato en las primarias presidenciales del Partido Republicano, en las que se alzaría victorioso el expresidente Donald Trump. A pesar ser derrotado en las primarias, Carson se convirtió en uno de los principales aliados de Trump y al llegar a la Casa Blanca, Trump le integró en su gabinete, nombrandole como secretario de Vivienda y Desarrollo Urbano de su ejecutivo, cargo que ocupó durante toda la presidencia del republicano.
En palabras del doctor Ben Carson, “esta normativa es el reflejo de que los gobiernos tienen una tendencia a crecer, infiltrarse y controlar a la población”
En la entrevista, Carson ha recordado “para esto tenemos la Constitución. La Constitución fue otorgada a la gente de este país, para que pudieran controlar el poder del gobierno”. “Y esta norma es un ejemplo de control por parte del gobierno, que teniendo esta base de datos, primero, someterá a la gente a vacunarse contra el COVID”. Sin embargo, el doctor ha considerado que los perversos fines de esta legislación no acaban aquí, señalando con tono premonitorio: “No duden que, con posterioridad, será utilizada para otros propósitos”.
Carson ha implorado que los americanos “tienen que ser inteligentes para reconocer estas peligrosas señales y pararlas, antes de que sea demasiado tarde”. Adicionalmente, ha añadido que “no lleva mucho tiempo cambiar una nación. Miren a Venezuela, y vean lo que ocurrió allí de la noche a la mañana”.
Carson ha denunciado el peligro de que la medicina se mezcle con la ideología política, y ha considerado que este ha sido el motivo de la pésima gestión de la pandemia. Así ha afirmado que deberían buscarse más alternativas a la vacunación, tales como terapias para combatir el virus. Y que cabría preguntarnos, por qué hay zonas del mundo donde el Covid no se expande significativamente, y en otras sí.
Así ha considerado que es un error “tener visión de túnel y decir a todo el mundo, póngase la vacuna y ya está”. Y ha reflexionado que, “si la vacuna es supuestamente tan efectiva, ¿por qué se necesitan dosis de refuerzo? Primero, iba a ser una sola dosis, luego dos, y ahora se necesita otra dosis de refuerzo. Probablemente, más pronto que tarde se necesitará una nueva dosis de refuerzo”.
Sobre la vacunación infantil ha considerado que los niños no deberían recibir dosis contra el Covid y lo ha calificado como “gran experimento”.